Un ejecutivo de BBVA de México de sucursal Angelópolis robó todos sus ahorros de casi dos millones de pesos a una persona de la tercera edad, así lo denunció su hija a través de las redes sociales.
Hoy fui a @BBVA_Mex a reponer mi plástico. Los nuevos candados de seguridad me recordaron la forma en que la digitalización vulnera a personas adultas mayores. Les voy a contar la historia de cómo un ejecutivo robó con tranquilidad la tranquilidad de mi papá. Abro hilo... ?
— gabriela di lauro (@gabydilauro) March 1, 2022
La usuaria, @gabydilauro abrió un hilo en su cuenta de Twitter para contar la trágica historia de cómo su papá se quedó sin sus ahorros que recibió de una herencia, por culpa de un ejectutivo de la sucursal de Aneglópolis.
“De casi dos millones de pesos quedaban -$800.00 Sí, leíste bien: menos ochocientos pesos”, escribió el hijo de la víctima de la delincuencia de ‘cuello blanco’.
¿Cómo fue el atraco?
De acuerdo a Gabriela Di Lauro (@gabydilauro), la gran estafa inició cuando su papá acudió a una sucursal de BBVA para poner diversificar su inversión que recibió a través de una herencia, y recibió ayuda de un ejecutivo de sucursar Angelópolis ‘toda su confianza’, pues la persona de la tercera edad, es “analfabeta digital que no tenía ni teléfono inteligente ni internet en su casa”.
No hay folio, no hubo reclamación formal porque la responsable de la sucursal dijo que no había evidencia de fraude. Esto fue en febrero de 2021 en la sucursal Angelópolis en Puebla.
— gabriela di lauro (@gabydilauro) March 1, 2022
Sin embargo, el ejecutivo realizó una gran estafa en contra del abuelito:
“Le dio dos tarjetas de débito y le dijo que las guardara muy bien, que no las usara y que todo lo que necesitara lo viera directamente con él, hasta le dio su número de celular”, narró Gabriela.
Pero, la persona de la tercera edad sufrió un accidente y necesitaba dinero para pagar su enfermedad, por lo que, la familia intentó retirar el fondo de inversión.
“En noviembre de 2020 mi papá sufrió un terrible accidente y nos dijo que su ejecutivo tenía su información para que pudiéramos tener acceso a su dinero y poder pagar los gastos del hospital. Le llamé a ese ejecutivo y me dijo que él no tenía nada”.
Ante esto, la familia como pudo pagó la cuenta del hospital y acudieron a la sucursal para retirar el efectivo. Pero, ya no había nada en la cuenta.
“Resultó que los dos plásticos que tenía no eran de su cuenta sino de el ejecutivo y de otra mujer que, según les dijo la responsable de la sucursal, había trabajado con ellos pero que también hacía tiempo que ya no”.
A continuación, toda la historia:
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Redacción / Diario CAMBIO
@Diario_Cambio