En un vuelo de Buenos Aires a la ciudad misionera de Posadas, un doctor con la camiseta bien puesta del número 10 de la Selección Argentina, salvó a un chileno de 65 años de edad.
El vuelo despegó en condiciones de lluvia poco favorables por lo que una vez en el aire, el avión comenzó a pasar por una zona de turbulencias. Sin embargo, el agitado despegue del vuelo de hora y media logró descompensar a un pasajero de nacionalidad chilena de 65 años.
Desde la cabina solicitaron la presencia de un médico entre los pasajeros, en donde el pasajero argentino que decidió no revelar su identidad porque “cualquier colega hubiera hecho lo mismo”, levantó su mano y, contrario a las indicaciones de permanecer sentado durante turbulencias, decidió atender al paciente.
Con la camiseta número 10 de la selección argentina, el médico terapista atendió al pasajero y paciente, de nacionalidad chilena, tenía antecedentes de cardiopatías, era hipertenso y diabético.
“Estaba con un cuadro compatible con un infarto que nosotros llamamos síndrome coronario agudo”, explicó el médico.
“Con la asistencia de la tripulación, y gracias a que el avión contaba con todas las herramientas (incluido un cardio desfibrilador y oxígeno en tubo), procedí a hacerle una vía porque el paciente saturaba al 78%, se le dio oxígeno y lo medicamos con unas drogas específicas para estos cuadros de infarto. De a poco, fue remitiendo el dolor de pecho y estabilizándose”, explicó el terapista.
Redacción Diario CAMBIO
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