A escasos metros del Boulevard 5 de Mayo y bajo la complacencia del Ayuntamiento de Puebla, un negocio de micheladas en plena vía pública pese a que está prohibido el consumo de alcohol en la calle.
Pesé a la amenaza de normatividad de no permitir el ambulantaje durante el desfile del 5 de Mayo, el Ayuntamiento no pudo con los vendedores informales quienes se adueñaron de las calles sin impedimento alguno.
Muestra de ello, fue el que hasta un puesto de micheladas se instalará en vía pública y estuviera vendiendo cerveza sin alguna restricción o llamada de atención por parte de las autoridades municipales.
Los elementos de normatividad que estuvieron en las calles fueron mínimos, además cuando se encontraban a algún ambulante solo se limitaban a apresurarlo a caminar.

José Campos
@josecamp11