Manuel Leal Maldonado, antiguo dueño del Hotel Rosewood y ex funcionarios del galismo, están en la mira de las autoridades por mandar a hacer ‘por debajo el agua’ modificaciones a los Lavaderos de Almoloya sin aval del INAH que le generaron un daño al patrimonio histórico, así lo informó el gobernador Miguel Barbosa, quien adelantó denuncias por este tema.
Acerca de posibles denuncias contra los responsables de los daños que detectaron en este espacio público, adelantó que toda la información recabada le será entregada a las autoridades correspondientes.
El Ejecutivo Estatal comentó que el tema del abuso por parte de las administraciones anteriores al patrimonio histórico fue una constante, ya que recurrían a la formación de fideicomisos, entrega de comodatos hasta por 99 años y la desmantelación de monumentos.
Barbosa Huerta indicó que el morenovallismo se interesaba más por entregar espacios a privados que hacerlos públicos, como ocurrió con los Lavaderos de Almoloya y otros sitios que el gobierno estatal recuperó recientemente.
“Vamos a dar a conocer lo que ocurrió a las autoridades, ya tendrán que definir si tienen alguna responsabilidad o no (…) era una verdadera manía por hacer que los monumentos no fueran de la gente sino de privados, es brutal, de verdad. Poder desquiciado lo que hubo”, dijo.
En la mira privados y ex funcionarios
Luego de que el pasado miércoles se reveló que estos Lavaderos tenían daños estructurales derivados de obras que la administración del Hotel Azul Talavera, antes Rosewood, llevaron a cabo, diferentes nombres han sido señalados como posibles responsables.
Uno de ellos, Manuel Leal Maldonado anterior dueño del Hotel Rosewood, que en junio del 2017 bajo la administración de José Antonio Gali Fayad recibió el poder de este espacio y ejecutó un proyecto de rehabilitación que no contaba con el trámite de permisos ante el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH).
En aquel entonces, Roberto Trauwitz era secretario de Cultura del Gobierno del Estado, puesto que hoy ocupa Sergio Vergara Berdejo, quien en esas fechas como gerente del Centro Histórico de Puebla declaró que el empresario sí contaba con permisos del INAH para rehabilitar los sitios históricos que le fueron entregados.
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David Meléndez
@dav_ms6