El predio de CIMA se ha convertido en ‘elefante blanco’, toda vez que quedó fuera del paquete de inversiones para la construcción de unidades médicas del IMSS en Puebla y perfilándose para albergar oficinas administrativas, pese a que costó más de 400 millones y fue la primera opción para sustituir el Hospital de San Alejandro.
Durante su visita a la entidad poblana el pasado sábado, el director general del IMSS, Zoé Robledo Aburto detalló que se harían inversiones por 10 mil millones de millones de pesos para llevar a cabo los proyectos de obras del nuevo Hospital de San Alejandro, Amozoc, Cuautlancingo y la ampliación de La Margarita.
Dentro de dicha bolsa de recursos no se contempló ni un solo peso a invertirse en el predio de CIMA, el cual fue adquirido por el organismo médico en la zona de la Vía Atlixcáyotl por un costo de 418 millones de pesos a finales del 2017.
Robledo Aburto indicó que en el caso de dicho terreno, se estaba analizando la posibilidad de que se convirtiera en la sede de oficinas administrativas o una Subdelegación, además de abrir la posibilidad de que pudiera albergar una Unidad de Cuidados Metabólicos.
Sin embargo, no se cuenta con un proyecto claro de qué forma se podrá tener un aprovechamiento de dicho predio que actualmente se encuentra abandonado.
Nuevo San Alejandro fue cancelado por daños estructurales
Originalmente, el IMSS decidió comprar el inmueble de CIMA dentro de San Andrés Cholula para que en dicho predio se pudiera construir el nuevo nosocomio de San Alejandro, aprovechando que ya existía una estructura de un hospital privado que nunca se terminó.
De esta manera es que se desembolsaron 418 millones 377 mil 726 pesos, cifra que estuvo por debajo del avalúo que rondaba los 500 millones de pesos.
Tras la compra se elaboraron proyectos para proceder con la edificación de la unidad médica, sin embargo, en marzo del 2019, el organismo realizó inspecciones en la estructura que ya se encontraba y determinó que esta presentaba fallas que impedían convertirlo en un hospital.
Ante esta situación, el entonces delegado del IMSS, José de Jesús González Izquierdo, refirió que se continuaría con el aprovechamiento del lugar, ya que la nueva unidad médica se construiría en uno de los terrenos que no tenía ningún tipo de infraestructura.
Con el paso del tiempo dicha idea fue quedando abandonada, hasta que se determinó que el nuevo Hospital de San Alejandro se construiría en el mismo terreno que el anterior, ya que se demolerían los antiguos edificios.
CIMA puede venderse y usar recursos ganados en otras obras
Respecto al tema, el diputado federal, Mario Riestra Piña, consideró oportuno aprovechar la propiedad de CIMA de otra manera, al indicar que ya presentó un punto de acuerdo en la Cámara de Diputados para que el lugar sea vendido y los recursos obtenidos sean usados en la aceleración de proyectos como el Hospital de Amozoc.
En entrevista con Diario CAMBIO, el legislador de Acción Nacional refirió que incluso se podrían obtener el doble de recursos que fueron utilizados en su compra, ya que se encuentra en una zona de alta plusvalía en el estado.
“Ya formalice una propuesta porque creemos que ese predio es tan valioso en la mayor zona de plusvalía del Estado de Puebla, en todo caso si no se va a destinar para un hospital, consideramos que sería preferible que se someta a la venta, esto generaría un rendimiento importante para el IMSS y esos recursos podrían reinvertirse para infraestructura hospitalaria “, expresó.
Riestra Piña también consideró oportuno que la actual dirigencia del IMSS realice investigaciones a fondo para determinar las irregularidades en la compra y en el terreno mismo, toda vez que nunca se mostraron pruebas de ello.
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David Meléndez
@dav_ms6