La gerencia en Puebla de Liconsa quedó en manos del grupo cercano a Blanca Alcalá Ruiz, pues Juan de Dios Bravo —exsecretario de gobernación en su administración— fue designado para administrar la empresa perteneciente al gobierno federal y no dudó en asegurar su participación en el proceso electoral intermedio de este año en sus tiempos libres.
En su primera intervención como gerente en la entidad de Liconsa, Juan de Dios anunció que estará muy pendiente de que en este año electoral la dependencia federal no desviará ningún recurso para las campañas y en que los programas de desarrollo social no tendrán fines políticos. Sin embargo, hizo público que apoyará al PRI en sus tiempo libres durante los comicios locales de julio próximo.
“Quiero decir que vamos a ser muy escrupulosos en el tema de la transparencia en esta institución, para que ningún recurso se desvíe para campañas políticas. Pero también es importante que sepan que dentro de lo que permite la Constitución y dentro de mis tiempos libres, seguramente me verán haciendo actividad partidista porque yo así lo creo pertinente”.
Bravo Jiménez le dio “caballazo” a Edgar Chumacero Hernández —yerno de la senadora priista— ante las versiones que daban por hecho su llegada a Liconsa. La tarde de ayer, el coordinador general de gerencias de Liconsa, Alejandro Olivares Monterrubio, pidió al nuevo funcionario federal sumarse a la Cruzada Nacional contra el Hambre, puesta en marcha por el presidente Enrique Peña Nieto.
El gerente de Liconsa destacó que dicho nombramiento traerá consigo una ejecución eficiente y sobre todo transparente, para lo cual habrá un estricto cumplimiento a la normatividad con el fin de responder satisfactoriamente a los procesos de evaluación implementados por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).
Explicó que la empresa federal cuenta con 332 lecherías en el estado, de las cuales 63 están en la capital y 269 en el interior. Tiene, además, 83 convenios interinstitucionales vigentes con albergues de diferentes centros de desarrollo indígena y cinco con casas de asistencia, lo cual da un total de 420 puntos de venta con beneficio a 133 mil 653 personas con el programa de abasto social de leche fortificada.
Por su parte, el delegado en Puebla de la Sedesol, Juan Manuel Vega Rayet, refirió que en los 14 municipios poblanos que comprende la Cruzada Nacional contra el Hambre, hay 500 mil personas en pobreza dimensional, por lo cual recalcó la importancia de los programas sociales.
Por último, Olivares Monterrubio destacó la importancia de la coordinación de acciones de todas las dependencias que tienen que ver con programas sociales, las cuales son prioritarias en la presente administración federal. Por tanto, enfatizó la importancia de Liconsa a través del programa de abasto y distribución de leche de alto contenido vitamínico.
