El párroco del municipio de Yehualtepec Mario Ordiano Ramírez denunció que ha sido extorsionado por presuntos zetas que le han exigido derecho de piso para dejarlo predicar en paz en la zona.

Reconoció que los sacerdotes no están exentos de hechos relacionados con el crimen organizado, ya que aunque aseguró saber de otras llamadas de extorsión, evitó especificar casos.

En entrevista para CAMBIO Regionales afirmó no haber denunciado el hecho dado que no le dio importancia a las amenazas que había recibido vía telefónica.

Esta denuncia se da a menos de un mes que fuera asesinado el párroco de Cuyoaco,  Erasto Pliego de Jesús, quien habría sido ultimado por su propio ahijado de bautizo, Yahir Esquivel C., quien en complicidad con otra persona de nombre Rogelio Reyes lo privaron de la vida e incineraron, debido a que el primero no quería cubrirle una deuda económica.

“Estamos inmersos igual que todos en las amenazas de este movimiento del narco. Estamos igual de expuestos. Tuve aquí una amenaza telefónicas de esas anónimas, pero no hay que darles mayor importancia”, dijo.

El entrevistado consideró que sí es importante que el gobierno tenga acercamientos con este sector, ya que en los últimos años han sufrido hechos violentos.

Por ejemplo, citó que el 23 de febrero del 2011, un sacerdote de nombre Santos Sánchez Hernández de 42 años de edad fue asesinado a puñaladas y violado en el interior del templo de San José,  en la comunidad de Mecapalapa, perteneciente a Pantepec.

Aunado a que hace un par de semanas, otro clérigo fue golpeado en Chachapa, Amozoc para robarle su vehículo.