¿Qué puede ser mejor que ver contento a un perro?… ¡Nada! Cómo se atreven siquiera a cuestionarlo.
Además, hacer feliz a un perro es de las cosas más fáciles del mundo solo con decirles “oye tú” basta para que estallen de emoción, así que nada malo puede resultar de hacerlos felices.
Excepto cuando eso significa prenderle fuego a un árbol.
Está foto capta el momento exacto en que este adorable Pitbull se deleita ante la presencia de fuego y como es costumbre internet se encargo de mejorarlo:
