Friday, 26 de April de 2024

Viernes, 02 Octubre 2015 11:24

Huracán Joaquín se aleja de EU mientras castiga a Bahamas

El huracán Joaquín castiga con vientos de hasta 215km/h a las Bahamas además de que ha golpeado a Cuba con lluvias, mientras que la amenaza de tocar tierra en Estados Unidos se desvanece poco a poco.


Joaquín sigue siendo este viernes 2 de octubre un huracán "extremadamente peligroso" que lanza destructivos vientos de 215 km por hora sobre las Bahamas y lluvias sobre Cuba, aunque el peligro de un impacto directo sobre la costa este de Estados Unidos se aleja lentamente.

 

"El huracán extremadamente peligroso Joaquín se mueve lentamente hacia el noroeste mientras golpea las islas del centro de Bahamas", que seguirá sufriendo el embate este viernes 2 de octubre, advirtió el Centro Nacional de Huracanes (NHC) estadounidense en su boletín de las 12:00.

 

Joaquín sigue siendo un huracán de categoría 4 en la escala Saffir-Simpson de máximo 5, lo que quiere decir que sus potentes vientos de 215 km por hora y ráfagas más violentas pueden causar gran destrucción.

 

El ojo del ciclón de gran tamaño se ubicaba a 50 km al noreste de la isla Long en Bahamas. Los meteorólogos esperan que en las próximas horas comience un movimiento más rápido hacia al norte en paralelo a la costa este estadounidense.

 

Bahamas, turístico archipiélago del Atlántico cercano al estado norteamericano de Florida, ha soportado desde el jueves 1 de octubre los vientos y las copiosas lluvias de Joaquín, el ciclón más potente de la actual temporada de huracanes, que se prolonga hasta noviembre.

 

Algunas islas han sufrido inundaciones de magnitud, pero no hay registro de víctimas, señaló el capitán Stephen Russell, de la agencia de emergencias de Bahamas, citado por el diario Tribune 242.

 

El NHC advertía de inundaciones costeras de hasta 3 metros y abundantes y persistentes lluvias de más de 600 mm en algunas zonas de Bahamas, cuyo gobierno suspendió las actividades y las clases en los colegios.

 

En Cuba, Joaquín provocaba precipitaciones y "penetraciones marinas" en la mitad oriental de la isla, por lo que la Defensa Civil pidió estar atentos y tomar las precauciones necesarias, según informaron el viernes medios locales.

 

"Las bandas externas de la circulación de este huracán producen numerosas lluvias y algunas tormentas eléctricas desde Camagüey hasta Guantánamo, las que han sido fuertes e intensas en algunas localidades", dijo el primer parte del día emitido por el Instituto de Meteorología.

 

No hay registro de daños por las lluvias, que por otro lado pueden ser beneficiosas en la isla que padece una fuerte sequía.

 

Peligro a la baja

 

Los estados de la costa este estadounidense de mantenían en alerta, aunque el NHC reportó este viernes que "la amenaza de un impacto directo de Joaquín en esas áreas está decreciendo".

 

"No obstante, hay incertidumbre sobre cuán cerca pasará Joaquín de las islas Bermudas, el extremo oriental de Nueva Inglaterra Estados Unidos y Nueva Escocia, Canadá", señaló el centro.

 

Aunque en definitiva no la golpee de lleno, la costa este estadounidense experimentará al menos lluvias y fuerte oleaje.

 

Los estados de Virginia, Maryland y Nueva Jersey, en donde zonas ya han recibido lluvias por otros frentes climáticos, declararon estado de emergencia para apurar los preparativos.

 

"Es mejor prepararse para lo peor", escribió con exceso de precaución el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, con el recuerdo vivo del huracán Sandy, que en 2012 arrasó la costa noreste de Estados Unidos, donde dejó alrededor de 200 muertos.

 

Joaquín es la décima tormenta de la temporada de huracanes del Atlántico.

 

Hasta ahora dos tormentas han alcanzado la categoría de huracán, pero el meteoro más destructivo fue la tormenta tropical Erika, que dejó 30 muertos en la pequeña isla caribeña de Dominica.

 

La Agencia Oceánica y Atmosférica de Estados Unidos (NOAA) había pronosticado que la actual temporada sería menos activa de lo habitual, con un máximo de cuatro huracanes, sobre todo por el fenómeno de El Niño, que inhibe la formación de tormentas.

 

Fuente: El Economista