Se debe renegociar el TLC en el tema agropecuario


Propone la Comisión Episcopal para la Pastoral Social, dice el arzobispo de Puebla


Olivia López Pescador

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Con el objeto de evitar que la desgravación arancelaria del TLC afecte a los indígenas y campesinos mexicanos, los Obispos de la Comisión Episcopal para la Pastoral Social proponen al Gobierno federal que analicen la posibilidad jurídica y la conveniencia económica para renegociar el apartado agropecuario, que generen mecanismos para ayudar a los campesinos a superar los efectos negativos del tratado, que construyan una globalización de equidad y justicia, destinen recursos al campo, entre otras acciones, así lo informó el arzobispo Rosendo Huesca y Pacheco durante su conferencia de prensa dominical.


Monseñor Rosendo indicó que actualmente el mercado sobrepasa los límites nacionales, con sus beneficios y sus limitaciones, por ello, los obispos inspirándose en la Doctrina Social de la Iglesia no pueden ni deben quedarse al margen en la lucha por la justicia, es por ello que hacen unas recomendaciones en torno al TLC.


Monseñor reconoció que aunque está consciente de que los obispos no son técnicos, sin embargo están preocupados porque se protejan los intereses de los campesinos e indígenas pobres, por ello, le están planteando al gobierno federal algunas propuestas. Pero además, con la entrada en vigor de la última parte del TLC, mencionó que es importante que se siga insistiendo en una política migratoria ordenada y justa entre los tres países, destinar más recursos para el campo y cuidar su recta aplicación. “Además que se busquen caminos en el ámbito del comercio internacional, para cambiar aquellos sistemas que generan injusticia y exclusión, en perjuicio de los países o sectores menos desarrollados.”


En cuanto a los casi 29 años de la visita pastoral del Papa Juan Pablo II a Puebla, comentó que a su parecer su aporte de iluminación doctrinal a la Iglesia Universal y su postura ha sido muy grande, ya que desde un principio insistió en que se acabaran las guerras y que la ONU cumpliera con su deber.


Cabe recordar que en aquel entonces existían muchas ideologías sobre la persona humana, como el modo existencialista, “había posturas negativas, pero por el otro lado estaba la postura del marxismo que decía que no necesitaba de la ayuda de Dios, sino que sólo bastaba que los proletarios del mundo se unieran para liberarse de todo. Es por eso que el Papa Juan Pablo II comienza en su discurso hablando de la verdad sobre el hombre, basado en la palabra de Dios, de que el hombre vale por sí mismo, independientemente de su edad, raza, nivel académico.”


Dijo que en ese tiempo había otra confusión, que tenía que ver directamente con la Iglesia Católica, ya que había ideas de segregación, porque algunos como Monseñor Marcel Lefebvre y sus seguidores  rechazaban al Vaticano II y hasta decían que el Papa Juan Pablo II y Pablo VI eran antipapas; “pero otro lado estaban los más radicales de la Teología  de la Liberación, por eso el Papa viajero habló al respecto.”
En temas pastorales recordó Monseñor Rosendo Huesca que este 20 de enero es la fiesta de San Sebastián Mártir, quien fuera condenado a morir atravesado a flechazos en el año 304, por negarse a renunciar a su fe en Cristo; así como también se celebra el aniversario del Beato Fray Sebastián de Aparicio, cuyos restos descansan en el Templo de San Francisco.

 

 

 


 
 
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