Inaugura Marín Hospital Norte… pero no funcionará

Los trabajos en el nosocomio van a marchas forzadas

Hay partes de su estructura que aún continúan en obra negra, además de que existen problemas con la instalación eléctrica, así se reveló tras una investigación de campo realizada por CAMBIO

Efraín Núñez Calderón

Sin contar con tomas de corriente, sin los gases médicos que se necesitan para los pacientes que sean internados y sin energía eléctrica, este día será inaugurado el Hospital General de la Zona Norte por el gobernador del estado. Es decir, será inaugurado un nosocomio que será totalmente infuncional. 

Como puede evidenciarse en una investigación de campo realizada por Cambio, los trabajos en el nosocomio se llevan —hasta hoy— a marchas forzadas, sin embargo, hay partes de su estructura que aún continúan en obra negra, además de que existen problemas con la instalación eléctrica.

Por si esto fuera poco, fuentes de la Secretaría de Salud confirmaron la ruptura entre Roberto Morales Flores, titular de la dependencia, y Javier García Ramírez, secretario de Desarrollo Urbano y Obras Pública (Seduop). Y es que García Ramírez intentó obligar al hermano del ex gobernador Melquiades Morales a recibir el hospital sin que las obras estuvieran concluidas y sin tener la seguridad de que la tecnología para la atención de enfermedades funciona a cabalidad.

¿La razón? El empresario encargado de la obra, Óscar García, es protegido por el secretario de Obras, pues fuentes del Gobierno estatal revelan que ambos personajes son socios en varios proyectos y negocios, razón por la cual García Ramírez presionó a Roberto Morales.

Luego de que esta casa editorial publicó la semana pasada el atraso y el conjunto de anomalías que rodean a una de las obras más importantes del marinismo, los trabajos se llevaron a cabo en tres turnos para finalizar la construcción de la segunda etapa en el menor tiempo posible.

El jueves pasado, el gobernador aseguró que este hospital quedaría inaugurado antes de que rinda su Tercer Informe de Gobierno. Por su parte, Oscar García —dueño de Construcciones Mova—, empresa que construye esta obra —cuyo precio se elevó de los 460 a los 700 millones de pesos—, aseguró que el hospital sería entregado ayer a la administración estatal.

Sin embargo, los trabajos aún siguen atrasados, la constructora trabaja a marchas forzadas pero es evidente que una de las torres del nosocomio aún se encuentra en obra negra. En las instalaciones se puede apreciar la maquinaria pesada, así como a los albañiles extrayendo el escombro, mientras otros trabajadores se esfuerzan por ingresar el material técnico a las nuevas instalaciones.

Por esta razón, Roberto Morales Flores, secretario de Salud, rompió contra Javier García. Según fuentes de la dependencia quienes omitieron revelar sus nombres por miedo a represalias, Roberto Morales se niega a recibir la obra debido a que no está plenamente construida y los médicos no han tenido acceso a la tecnología con la que se atenderán las dolencias y enfermedades.

La molestia del titular de Salud radica en que la constructora ha cambiado en repetidas ocasiones los planos sin una justificación al respecto. A decir de los informantes a pesar de que la obra se entregue en los próximos días, el hospital no podrá operar plenamente hasta dentro de unas semanas.

El propio Morales Flores evidenció el jueves pasado su descontento respecto a la forma en la que la Secretaría de Obras está operando la construcción de importantes hospitales, al señalar que su dependencia recibirá estos nosocomios hasta que cuenten con las medidas respectivas:

“Estamos esperando a que nos digan ‘aquí está tu hospital y véanlo cómo está.’ Vamos a recibir el hospital de acuerdo a las condiciones. El Hospital General de la Zona Norte no lo voy a recibir hasta que mi equipo de trabajo me diga que sí se puede laborar, esto no es de dimes y diretes (…) El problema es que nosotros no hemos podido meter las manos porque no nos han entregado el hospital (…) La secretaría tiene un área de construcción y conservación, ellos verifican la obra. Éste me debe decir si está o no en condiciones. No vamos a solapar cosas ni vamos a decir mentiras, tenemos que ser éticos porque vamos a atender vidas humanas, no podemos arriesgarnos (…) Todos los médicos están capacitados para el manejo del equipo pero no nos lo han entregado”.

Incumplimiento del contrato

Hay que recordar que esta construcción debió haber sido entregada el pasado 31 de diciembre como consta en la licitación pública O.P./L.P.E./SED UOP-20070178. Sin embargo, como este diario ha venido dando cuenta, no es la primera vez en que Óscar García, a través de sus firmas Construcciones Mova y Diseños Arquitectónicos e Ingeniería de Puebla, incumple un contrato signado con la Secretaría de Desarrollo Urbano y Obras Públicas.

Según las bases de la licitación número 20060792, el Hospital General de Tepeaca, construido por Diseños Arquitectónicos e Ingeniería de Puebla, debió haberse terminado el 19 de septiembre de 2007, sin embargo, a través del convenio de diferimiento en plazo O.P./L.P.E./SEDURBECOP-20060792-01, la constructora logró una prórroga al 15 de octubre pasado, misma que incumplió.

Por su parte, Construcciones Mova, firma que agrupa la mayor parte de las obras de Óscar García, pidió una prórroga para la culminar la construcción de la Torres de Especialidades del Issstep. Esta empresa ganó en 2006, aunque tenía obras en proceso.

A pesar de las inconsistencias y el incumplimiento en las obras del Issstep, la firma fue beneficiada con dos prórrogas para la terminación de sus trabajos. Inicialmente, la culminación de la Torre de Especialidades —obra que comenzó el 29 de agosto de 2006— se previó para el 31 de diciembre de ese año, empero, a través de un convenio de diferimiento número O.P./L.P.E./SEDURBECOP-EEHISSSTEP-02, Mova logró una extensión de sus trabajos al 22 de enero de 2007. De nueva cuenta incumplió por razones que la Seduop no justificó. Aún así le dieron una nueva prórroga de 68 días, la cual culminó el 31 de marzo de 2007.

Por otro lado, los miembros de la escolta del empresario que la semana pasada participaron en la agresión contra Cambio, aún siguen laborando a las órdenes de Óscar García, quien a decir de fuentes del Gobierno, presume su cercanía con el gobernador Mario Marín.