No tengo gallo: Marín

El mandatario reunió a la bancada priista para hablar de tres puntos: la sucesión, el enroque y la agenda legislativa

Ante los diputados priistas, el gobernador renegó de su delfín, Javier López Zavala, al tiempo de argumentar que el enroque en el gabinete fue para optimizar el desarrollo de la administración estatal

Selene Ríos Andraca

Las presiones políticas y mediáticas terminaron por ahogar al gobernador Mario Marín Torres, quien en una comida con los miembros de la bancada priista dio un manotazo en la mesa para negar que los relevos en el gabinete tuvieran como fondo privilegiar a Javier López Zavala rumbo al 2010: “No tengo delfín” advirtió.

El martes pasado, Marín se reunió con los diputados priistas en Casa Puebla, donde los urgió a establecer y presentar cuanto antes la Agenda Legislativa que regirá los trabajos de la LVII Legislatura, narraron a Cambio fuentes legislativas.

Fueron tres los temas clave que tocó Marín en el encuentro, al cual asistió como invitado especial el secretario de Gobernación, Mario Montero Serrano: los cambios en el gabinete, el proceso sucesorio y la agenda legislativa.

Sobre los cambios en el gabinete, Marín Torres aseguró ante sus diputados que ningún movimiento fue estratégico político para beneficiar a su favorito para sucederlo, Javier López Zavala, recién nombrado secretario de Desarrollo Social.

Según el mandatario el enroque en el gabinete fue para mejorar el desarrollo de la administración y para optimizar los programas de su gobierno en el último trienio.

Y fue en ese momento cuando exhortó a los legisladores a mantenerse al margen de la sucesión: “Ustedes dedíquense al trabajo legislativo y a sacar adelante las reformas que están en puerta, como la electoral, así como a calificar las cuentas públicas.”

Incluso, prometió que les pediría a sus secretarios que no utilizaran la estructura gubernamental para armar una precampaña o para beneficiar las aspiraciones políticas.

El encuentro tardó poco más de dos horas y ahí José Othón Bailleres, presidente de la Gran Comisión del Congreso local, rindió una especie de informe de labores del primer periodo de sesiones.

De acuerdo a las fuentes consultadas, José Othón Bailleres presentó una numeralia de las leyes y los acuerdos aprobados, así como las medidas y las estrategias utilizadas para salir avante en el primer periodo de sesiones.

Algunos diputados externaron su emoción por fungir como legisladores y hubo otros que elogiaron su propio trabajo y el de su líder de bancada.

La única diputada que no asistió al encuentro con Mario Marín fue Bárbara Ganime, la única diputada de la LVII Legislatura que aún se encuentra vacacionando en las playas de Acapulco, Guerrero.

Los diputados que tomaron la palabra fueron: Malinalli García, Humberto Aguilar y José Othón Bailleres, entre otros. El menú de la tarde fue: sopa de fideo o crema poblana, pipián y mole rojo.