Saca San Luis el colmillo



Édgar Contreras / Agencia Reforma

 

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 Cuando parecía que San Luis le arrebataba un valioso empate al Pachuca, le cayó del cielo una victoria en tiempo de compensación.


Un penal acertado por Eduardo Coudet puso a los Gladiadores con medio pie en la Liguilla del Clausura 2008, luego de su victoria ayer por 1-0 en el Estadio Hidalgo, en el primer juego del Repechaje.


Todas las emociones contenidas durante el partido explotaron después del 90', cuando el árbitro Fabricio Morales se empecinó en darle color al que hasta entonces era un cerrado empate a cero, mediante la marcación de un penal y la expulsión a Christian Giménez de los Tuzos, por una mano en el área, y a Alfredo Moreno del cuadro visitante, por conducta violenta.


Alguno de los dos futbolistas más desequilibrantes de sus respectivos equipos vivió ayer su último partido en el torneo, el "Chaco" lleva las de perder.


Ni la versión más ofensiva del Pachuca pudo descifrar el acertijo defensivo que le preparó San Luis.


Porque ayer predominó el orden sobre la dinámica, la concentración sobre el espectáculo, cuya conclusión fueron los escasos tiros a gol.


Cuando el técnico Enrique Meza se percató del sosiego con el que el rival lo encaraba, envió al campo a Juan Carlos Cacho, Andrés Chitiva y Luis Montes con la intención de crear una mancuerna de miedo al lado de Luis Rey, Damián Álvarez y Christian Giménez.


La apuesta del Pachuca consiguió cercar por momentos al rival, meterlo a su área y ponerlo a sufrir con disparos de larga distancia que Montes intentó desde el sector izquierdo.


Sin embargo, fueron las jugadas a balón parado las que provocaron el sufrimiento del cuadro potosino en la antítesis de su conducta, cuando el balón estaba en movimiento.


Damián Álvarez estuvo cerca de emular el gol olímpico que el "Chaco" Giménez le anotó a los Gladiadores en el torneo regular, a Leobardo López le faltaron un par de centímetros para empujar el balón, y Luis Rey provocó los alaridos de la afición sin que despertaran totalmente, al menos hasta que el silbante y sus decisiones entraron a escena.


Si Pachuca quiere avanzar a la Liguilla tendrá que apelar a todas sus virtudes futbolísticas para resolver el enigma de un San Luis que ya se relame la siguiente fase.


 
 
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