Henaine le enmienda la plana al gobernador

Dice que su predio pertenece a San Andrés y no a Puebla, como lo declaró el gobernador

De la noche a la mañana, Ricardo Henaine dejó de ser un empresario mediático y futbolero para transformarse en un ambientalista radical preocupado por el calentamiento global y la deforestación, al iniciar el “rescate” de la Reserva Atlixcáyotl-Quetzalcóatl.

Selene Ríos Andraca

Ricardo Henaine Mezher ahondó sus diferencias con el gobernador Mario Marín Torres, al desmentirlo públicamente, una vez que el propietario de Valle Fantástico aseguró que la modificación del uso de suelo tendrá que ser avalada por el Ayuntamiento de San Andrés Cholula y no el capitalino, como lo declarara el mandatario al término de su comparecencia en el Congreso de la Unión.

En medio de la tempestad, Ricardo Henaine se disfrazó de empresario ecológico para distraer la atención mediática con la siembra de arbolitos en las dos hectáreas federales que forman parte del Parque Metropolitano, cuatro años después de incumplir con las cargas establecidas en el contrato de donación onerosa que le otorgó la administración melquiadista.

De manera improvisada y en un terreno fangoso, Henaine Mezher recordó que una de sus obligaciones que adquirió cuando se adueñó de 18 hectáreas de la Reserva Atlixcáyotl-Quetzalcóatl es la de preservar, proteger y mantener parte de la reserva ecológica.

“Es un parque ecológico metropolitano que no es mío, pero tengo la obligación de mantenerlo y de protegerlo, pero no es mío yo no lo compré, pero lo hago porque es mi obligación de acuerdo a las cargas que se me impusieron cuando adquirí Valle Fantástico.”

Curioso es que el también propietario de El Heraldo recordó sus obligaciones, después de que los medios de comunicación local evidenciaron el fraude al erario que realizó la administración melquiadista y el empresario.

Las declaraciones del empresario “ecológico” estuvieron plagadas de contradicciones, pues primero dijo que el predio le fue donado, después que lo compró por 27 millones de pesos, para terminar diciendo que poseer las tierras lo sujetan a obligaciones.

Henaine aclaró también que a él le pertenecen solamente 17 hectáreas de las 18.7 que había señalado al principio, predio que puede utilizar para cualquier fin si así se lo propone.

A pesar de que el gobernador declarara que Henaine está imposibilitado de vender, el también socio mayoritario de La Franja aseguró que en sus terruños él puede hacer lo que le venga en gana “incluso, vender”.

Sin embargo, reiteró que por el momento no está en sus planes vender un solo centímetro de las 17 hectáreas que posee: “No la voy a vender. Puedo hacer lo que yo quiera. El uso de suelo es para un parque de diversiones pero lo puedo cambiar cuando quiera.”

Visiblemente irritado, Henaine comentó que en los últimos cuatro años ha pagado el impuesto del predial en el Ayuntamiento de Cholula, por lo que consideró que será ante esa instancia a la que recurrirá para solicitar la modificación del uso de suelo.

Contrario a lo que declarara el propio Mario Marín, quien dijo el martes pasado en San Lázaro que las hectáreas de Ricardo Henaine corresponden a la capital poblana porque se encuentran antes del río Zapatero que divide a Puebla con San Andrés Cholula.

Henaine, ecologista
de la noche a la mañana

De manera inesperada y con el claro objetivo de apaciguar la presión mediática sobre su figura, el empresario se levantó ayer en la mañana con una nueva forma de pensar, de empresario mediático y futbolero se transformó en un ambientalista radical.

“Estoy iniciando la reforestación porque es una de las cargas que yo tengo de cuando adquirí los terrenos de Valle Fantástico. Se van a sembrar arriba de la rivera del río que es la zona federal y tenemos que sembrar la reserva más la zona federal, unos 60 mil metros.”

Evidenció su amplio conocimiento en la flora que sembrará en las hectáreas federales: “Sembraremos laureles, pino y rayo. Tenemos árboles mayores que hemos rescatado de otros lugares y para que no se pierdan los estamos trayendo al parque.”

Pero la pregunta fatal llegó: ¿Por qué hasta ahora recuerda sus obligaciones? Y el empresario se vio obligado a desplegar una lista de pretextos para salir del aprieto.

“Porque el tipo de acción no se había delimitado la zona federal y no se había planteado dónde quedaría el parque, eso se tuvo que hacer en conjunto con el municipio. De hecho no hay una fecha establecida para que lo hiciera, ya teníamos el proyecto y sólo estábamos esperando para hacerlo.”

Tajante, aseguró que dentro de cinco meses estarán sembrados los 60 mil metros cuadrados que ayer inició.

Los regaños de Henaine

Henaine se dio el lujo de reprender a los reporteros que acudieron a su llamado para la siembra de los arbolitos. Lo primero que les pidió fue que lo cuestionaran sobre la siembra y después, les gritó que él no era ni juez ni jardinero.
Sobre el tema del jardinero, Henaine se negó a responder a los cuestionamientos de los reporteros que se interesaron por el tipo de árboles que se están sembrando y por la longevidad de los mismos: “Tendrán que preguntárselo a alguien con mayor experiencia, yo no soy jardinero.”

El segundo regaño contra los reporteros fue porque le cuestionaron sobre las condiciones deplorables en las que se encuentra la parte federal de la Reserva: “¡Se nota que usted no sabe nada de lluvias! Usted no conoce de ecología, está lloviendo y cuando llueve no se puede mantener en orden este tipo de espacios.”

Y por último, cuando los reporteros le señalaron que sus hectáreas correspondían a la capital poblana, el empresario se molestó y dijo que él había pagado los impuestos prediales en San Andrés Cholula.

“Ah mire, pues ese no es problema mío, ahora quieren que sea juez también. Ya soy jardinero, ya soy juez ¿qué más quieren que sea? ¡Díganme!”, expresó el socio mayoritario de los camoteros.

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