Wednesday, 24 de April de 2024

Impera la desorganización en marcha #PueblaDeLuto

Lunes, 11 Agosto 2014 00:00
Impera la desorganización en marcha #PueblaDeLuto
archi6.jpg archi11.JPG archi._6.jpg archi4.jpg archi2.jpg archi._7.jpg archi._10.JPG archi._2.jpg archi3.jpg archi._3.jpg archi._8.JPG archi._4.jpg archi7.jpg archi10.JPG archi._12.JPG archi5.JPG archi._5.JPG archi12.JPG archi._11.JPG archi._1.JPG archi8.JPG archi._9.JPG archi9.JPG archi1.JPG
La protesta careció de liderazgos políticos, uniformidad en las mantas y estructura en el recorrido. Ni en las consignas y gritos pudieron encontrar uniformidad los inconformes del régimen; por el frente de la marcha, unos alzaban la voz con “asesino, asesino”; atrás resonaba “Moreno bala, Moreno bala”, y tenuemente se distinguía el “Moreno Valle que matas a los niños”
  • Osvaldo Macuil Rojas / Gerardo Ruiz / Víctor Hugo Juárez



La marcha #PueblaDeLuto fue un gran desmadre, producto de la falta de liderazgos políticos u organización partidista.



Sin uniformidad en las pancartas o en sus mantas, cada quien se quejó del autoritarismo de Moreno Valle como mejor pudo y quiso.



Ciudadanos de a pie, sin organización ni estructura, tomaron la mejor vereda sin importar que el contingente de 10 mil poblanos utilizara los dos sentidos de la avenida Juárez y con eso perdiera efecto para las fotos.



La desorganización imperó en el principio, en el medio y en el final.



Tras la llegada del primer contingente de sindicalistas proveniente del Triángulo de las Ánimas, en la avenida Juárez hubo embotellamiento, siendo la desorganización y el caos lo que comenzó a desatarse.



“Den paso a la lona principal”, gritaban los supuestos organizadores que decidieron tomar la batuta del movimiento, sin que nadie les diera importancia por la falta de liderazgos auténticos.



Ni en las consignas ni en los gritos pudieron encontrar uniformidad los inconformes del régimen. Por el frente de la marcha unos alzaban la voz con “asesino, asesino”; atrás resonaba “Moreno bala, Moreno bala”, y tenuemente se distinguía el “Moreno Valle que matas a los niños”.



En redes sociales fue constante la invitación a portar camisetas blancas o negras, según el punto de partida, colores que fueron opacados con el vestuario dominguero que la mayoría optó por elegir para salir al recorrido de 5.8 kilómetros.



Esto derivó en un folclor de gorras, viseras, pañuelos y demás prendas improvisadas para cubrirse del sol, como el caso de la perredista Roxana Luna, quien decidió utilizar un sombrero que algún campesino le regaló.



Pancartas con un sinfín de quejas y con diferentes formas de exigir la renuncia del gobernador poblano, fueron opacadas por un espontáneo que decidió caracterizar a Moreno Valle en un muñeco de trapo, que sólo era reconocido porque en la cara tenía el nombre de Rafael, y que fue arrastrado por todo el trayecto.



La madrina de la marcha fue Miss Bala, un joven caracterizado de mujer, quien emuló al personaje principal de la película del mismo nombre de Gerardo Naranjo.



Otros optaron por hacer sentir la vergüenza que les genera estar representados por el morenovallismo, y decidieron ocultar sus rostros en bolsas de papel, en las que dibujaron el impacto de las balas de goma.



Como en un festín, los poblanos olvidaron los cánticos tradicionales de una marcha e hicieron paso a gritos improvisados, esos que nunca faltan en una convivencia. “Puto”, “putísimo”, fueron los calificativos con los que prefirieron agredir al gobernador y sólo faltó una caguama para amenizar el momento.



De a poco, fueron resaltando los supuestos liderazgos, que en otros tiempos tenían convocatoria en sus partidos políticos, en sus empresas o en sus colonias. Emilio Maurer —a quien le quieren quitar su hacienda para convertirla en parque industrial—, desfiló por un momento prácticamente del brazo de Ana Teresa Aranda, la panista que perdió todo desde que Moreno Valle ingresó al partido.



El momento sólo fue para la foto, luego optaron por seguir dispersos con sus 10 seguidores.



Gerardo Fernández Noroña, el que califica a todos de “canallas” y que llegó sin invitación, deambulaba por la avenida Juárez con su sombra y uno que otro poblano que recuerda su paso por la Cámara de Diputados.



Roxana Luna se mantuvo en el lugar que ha ocupado el último mes pues nunca se despegó de Elia Tamayo, la madre de José Luis Alberto Tehuatlie Tamayo, ni de su sombrero singular.



Por el contingente se podía ver desfilar al académico de la BUAP, Alfonso Vélez Pliego; al priista, Fernando Castillo Montemayor; a la verde ecologista, Geraldine González, y el eterno candidato de la izquierda a la alcaldía, Ricardo Villa Escalera.



Al puro estilo de Roberto Madrazo, Enrique Doger decidió saltarse el recorrido y llegar triunfante a la meta en el zócalo. El diputado federal desde una mesa de un restaurante daba el apoyo moral del PRI, mientras tomaba un café para no asolearse.



La fuerza del movimiento nunca llegó a su máxima expresión. Mientras se llamaba a la organización del contingente, unos decidieron abrirse paso en el carril contrario en la Juárez y avanzar más rápido para acabar su recorrido y regresar a sus actividades dominicales.



Esa urgencia por regresar a la cotidianidad se observó de nueva cuenta en el primer cuadro de la ciudad.



Cuando se dio el momento de demostrar la fuerza del movimiento y aglutinarse en el zócalo de la ciudad como aquel 27 de febrero de 2006, las filas se rompieron y en el lugar quedaron los habitantes de Chalchihuapan, aquellos que desestabilizaron la política morenovallista, que reunieron a miles en el Distrito Federal y que volvieron a hacer lo mismo en la Angelópolis.



Ellos mismos le dieron el pan que necesitaba el gobierno estatal. Los fotógrafos del gobierno que disparaban desde el balcón principal del Ayuntamiento encontraban el objetivo de un movimiento disperso, del que sólo alcanzaron a contabilizar mil 250 personas.



 



Consignas



Asesino, Asesino.



Moreno Bala.



Morenito, morenito dónde estás, dónde estás, chingas a tu madre, chingas a tu madre, donde estés, donde estés.



Puebla está de luto, por culpa de un puto.



Moreno Valle asesino, que matas a los niños.



El pueblo se cansa de tanta pinche transa.



Moreno hermano del burro y del marrano.



Aquí se ve, aquí se ve, Moreno Valle presidente no va a ser.



Moreno Valle te vamos a sacar.



 



 

Valora este artículo
(0 votos)
Modificado por última vez en Lunes, 11 Agosto 2014 04:03