El consorcio Concesiones Integrales SA de CV no asumió el control de la prestación del servicio del agua en Puebla y otros cinco municipios de la zona conurbada como estaba previsto para el 16 de abril pasado, debido a que las empresas que lo conforman —Aguas de México, Ticsa y Epcor— solicitaron una prórroga de un mes para realizar el pago de la contraprestación de mil 400 millones de pesos a través de un crédito puente, por lo que el SOAPAP continuará con la titularidad de los servicios por un mes más.
El miércoles pasado CAMBIO publicó que estas tres empresas ganaron la licitación de los servicios del Sistema Operador de Agua Potable y Alcantarillado que emitió el gobierno del estado el 18 de septiembre del año pasado, y se establecieron una serie de condiciones en el título de concesión para que entrara en operaciones, entre las que se encuentra el pago de una contraprestación inicial por mil 400 millones de pesos, y de acuerdo a la concesión que firmaron con el morenovallismo, invertirán 3 mil 800 millones de pesos en infraestructura por los próximos cinco años.
Una vez que concluya este periodo, la empresa que ofrecerá el servicio de agua potable, drenaje y alcantarilladlo, destinarán el 10 por ciento de sus ingresos anuales totales para trabajos de infraestructura, así como el 5 por ciento al gobierno del estado.
Sin embargo, fuentes del SOAPAP revelaron a esta casa editorial que el martes les anunciaron a los trabajadores que no los liquidarían como estaba previsto para el 15 de abril y las empresas privadas tomarán el control del servicio un día después.
El argumento fue que Concesiones Integrales no había cumplido con un pago estipulado, por lo que no había dinero para liquidar a los mil 200 trabajadores que tienen contrato con el organismo operador.
Por ello, les informaron que su relación laboral con el SOAPAP continuará un mes más, hasta que se cumplan con las condiciones de la concesión, pues ni siquiera se ha redactado el acta de entrega-recepción para que Aguas de México, Ticsa y Epcor asuman el control.
Entre los trabajadores existe incertidumbre ante la suspensión del inicio de operaciones, pues el 16 de abril, cuando estaba contemplado que Concesiones Integrales tomara el control, el director de Administraciones y Finanzas del SOAPAP, Jorge Gómez Haro Rivas, renunció a su cargo y era quien tenía la relación directa con las empresas privadas.
Una vez que estas empresas tomen el control, SOAPAP seguirá funcionando como una entidad paramunicipal y será el órgano rector de la licitación y mantendrá la relación con la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y recibirá el subsidio por 700 millones de pesos que destina la Federación.
De acuerdo a fuentes consultadas por CAMBIO, el consorcio está vinculado a la empresa de servicios públicos EPM de Medellín, Colombia. El consorcio que se quedó con las tareas del SOAPAP, está conformado por Aguas de México que ofrece servicios en el Distrito Federal, Epcor de origen canadiense y Ticsa también de capital mexicano.
La concesión
La publicación emitida el 18 de septiembre del año pasado establece que los servicios del SOAPAP se entregarán por 30 años, tiempo en el que la empresa tendrá a su cargo el manejo del agua potable, drenaje, alcantarillado, saneamiento y disposición de aguas residuales.
Así como el acondicionamiento, mantenimiento, operación y administración de la estructura hídrica “en favor de ciertos municipios”, de acuerdo al título de concesión que se firmó con la empresa.
Posterior al fallo que se emitió se ha cumplido con el pago de la contraprestación de mil 400 millones de pesos por parte de la operadora; se ha suscrito el título de concesión y se creó un fideicomiso de administración.
Las nuevas tarifas
A partir del 1 de mayo, Concesiones Integrales aplicará la estructura tarifaria que aprobó el Congreso local en marzo pasado, y que prácticamente tendrá un incremento, en algunos casos, de más del 200 por ciento para uso habitacional y del 55 por ciento para el sector empresarial y consorcio; además de que el pago dejará de ser bimestral para ser mensual.
A la par, el nuevo sistema de cobro que aplicará en Puebla y la zona metropolitana implica una migración gradual al servicio de medidor, y el precio de los metros cúbicos consumidos tendrá un precio diferente, de acuerdo a un catálogo de colonias.

