Saludamos el año enterándonos de la disposición de los dirigentes del PRI, PAN y PRD para constituir un frente para enfrentar a la toda poderosa fuerza de Morena.

 

Lamentablemente, pese a la fortaleza que mostraba el frente y con todo y las obligadas sonrisas que lucían sus dirigentes para las fotos; todo resultó un engaño y a las primeras de cambio el prometedor frente se vino abajo.

 

Trasciende que la primera en votar todo fue la profesional del violín, Genoveva Huerta, quien tronó el proyecto, mandó a su casa a cada una de las corrientes políticas, y en una carambola muy bien planeada decidió presentar licencia al cargo para irse en busca de una candidatura para volver a ser diputada.

 

Así propuso al PRI, al PAN y al PRD que cada uno haga acopio de sus propias fuerzas para contender y que se volverán a ver las caras el domingo 6 de junio.

 

¿Qué bicho le picó a la dama del violín?

 

¿Quién la está asesorando?

¿De quién recibe línea?

 

¿A cambio de qué desbarata?

 

Ante todo deja claro que hay una poderosa corriente dentro del panismo que no digiere la candidatura a alcalde de Eduardo Rivera Pérez.

 

El personaje molesta.

 

Estorba.

 

El plan es sacudírselo.

 

Los hechos en sí sólo dan una muestra de la inmadurez política, y de que por encima de todo hay titiriteros que rechazan la coalición PRI-PAN-PRD con todo y su candidato, del que no van a poder sacar una buena raja.

 

Así la historia, así los hechos, así la realidad de una falta de altura para hacer política y encausar un proyecto de democratización que conduzca a multiplicar mejores oportunidades para todos con una sociedad integrada con todo y sus diferencias ideológicas y políticas y lista para hacerle frente a la corriente poderosa que gobierna este país.

 

Los días difíciles

 

Los días difíciles hoy los enfrentan todos, personas, familias, negocios, y no se excluyen organizaciones de la sociedad civil creadas para dar respuestas a la sociedad en espacios en los que hay ausencia de las instituciones gubernamentales.

 

Es el caso -entre otros- de Justicia Ciudadana, fundada en 1999 por un grupo de empresarios encabezado por el industrial Jesús Migoya Junco que 2 veces fue víctima de un secuestro.

 

Justicia Ciudadana se ha mantenido con un trabajo eficiente éstos 22 años gracias a aportaciones de empresas, empresarios y otras instituciones preocupadas por los temas de la inseguridad y la violencia, convencidos de que se tiene que trabajar para combatir la impunidad y lograr la justicia para las víctimas del delito

 

A las víctimas se les apoya, se les acompaña desde la denuncia y todo el proceso legal al que se tienen que enfrentar para ser resarcidas en lo moral y lo económico.

 

Para lograr el objetivo, Justicia Ciudadana cuenta con un equipo de trabajo formado por abogados, criminólogos, psicólogos, y especialistas en mercadotecnia y diseño gráfico, trabajo social y comunicación.

 

Además de atender los efectos de la descomposición social, a través de talleres, trabaja en la prevención del delito, de las adicciones, y lucha para inculcar la cultura de la denuncia.

 

Y de acuerdo con la tendencia de los tiempos, para agilizar la solución de muchos problemas desahoga casos a través de un centro de mediación de acuerdo a lineamientos fijados por el Tribunal Superior de Justicia.

 

Pese a las limitaciones derivadas del año de la pandemia en el 2020 ventiló 4 mil 513 casos y dio atención en línea a 5 mil 286 casos.

 

Su trabajo es incuestionable.

 

Pero hoy enfrenta una caída en sus ingresos, ante lo cual solicita el apoyo de la sociedad y las empresas para no fallarle a una sociedad que en sus momentos de crisis se le dificulta conseguir el respaldo, el apoyo, la orientación.

 

Su domicilio está en la 13 Sur 1910 de la colonia Santiago. Su teléfono es el 2222 962121. Y de acuerdo a la contingencia sanitaria, atiende presencialmente de 9 de la mañana a 4 de la tarde, con las limitaciones de no poder recibir a personas con el acompañamiento de menores y abuelos, por lo que pone a disposición, su atención en línea al número telefónico citado y al 2222 966464.

 

Las oportunidades

 

En la actual cresta de la pandemia, el gobierno de Canadá restringe vuelos para blindar a sus habitantes de nuevos contagios de coronavirus. Pero al mismo tiempo lanza la invitación para ir a trabajar en el procesamiento de sus productos del mar que gozan de un gran prestigio.

 

Los interesados deben de contar con experiencia en el corte, la limpieza, el desmembranamiento y la preparación de los mariscos y pescados.

 

Este empleo lo ofrece en Richibucto y ofrece un salario mensual equivalente a 36 mil pesos.