El Centro Histórico se convirtió en un basurero debido a la falta de acciones por parte de la encargada del Organismo Operador del Servicio de Limpia, Myriam Arabian Couttolenc, quien no ha podido mantenerlo limpio a pesar de que cuenta con un presupuesto de 376 millones 217 mil 71 pesos para emprender programas que ayuden a reducir los desechos humanos.
De acuerdo con el presupuesto 2022 del Ayuntamiento de Puebla, Arabian Couttolenc deberá generar acciones de educación sobre el desecho de residuos, reciclaje y generar un programa de limpieza con el objetivo de mantener en buen estado las calles de la ciudad
Así las cosas el #OSSL cuenta con u. Presupuesto de 376 millones de pesos y las calles del #CentroHistórico se encuentran en este estado. @PueblaAyto @eduardorivera01 pic.twitter.com/XBGdIQzIX9
— Ricardo Juárez (@RicardoJuaAlma) January 17, 2022
Sin embargo, estos programas aún no se han implementado, lo cual ha generado que diversas zonas de la capital estén descuidadas y en mal estado situación que el alcalde Eduardo Rivera Pérez prometió que iba a revertir.
En un recorrido hecho por CAMBIO se pudo observar que el primer cuadro de la ciudad cuenta con los botes de basura llenos, calles sucias donde hasta vómito se puede observar, además de que la calle 5 de Mayo es el principal tiradero de los ambulantes que dejan sus platos, vasos y hasta mercancía que no les sirve regadas por todo el corredor.
La gran cantidad de basura que ingresa en los botes de basura que se ubican en el primer cuadro de la ciudad provoca que los poblanos dejen a un lado de los contenedores su basura, sin importarles que esto reduzca la movilidad peatonal.
El pasado 11 de noviembre de 2021 la encargada del Organismo Operador del Servicio de Limpia, Myriam Arabian Couttolenc, culpó a los poblanos y turistas por el incremento de basura en el Centro Histórico, al argumentar que mientras incrementa su presencia en la zona durante las últimas semanas ocurre el aumento de desechos en las calles y los botes de basura.
La funcionaria municipal reconoció que su organismo no se da abasto para poder controlar la producción de basura, pues no cuenta con máquinas de barrido rápido y los 340 ‘naranjitas’ priorizan el cuidado de otras zonas.
Ricardo Juárez
@RicardoJuaAlma