Experiencia aterradora resulta trabajar en las instalaciones de la Tesorería Municipal, pues los funcionarios realizan sus actividades sin sana distancia, sin insumos sanitarios para prevenir el coronavirus, y sin descanso; aun así reciben a más de 200 personas diarias, lo que ha provocado un brote de COVID en las instalaciones, aunque sólo se reconocen cinco contagios y una muerte.
El miedo de los funcionarios por padecer esta enfermedad se justifica en que los jefes directos han ocultado los casos de coronavirus, pues de la noche a la mañana existe nuevo personal en las ventanillas.
En entrevista con CAMBIO, trabajadores atemorizados informaron que son obligados a trabajar sin importar que sean de edad avanzada, padezcan hipertensión o diabetes, bajo el pretexto de que son considerados como dependencia necesaria.
Por si faltara más, la Tesorería no les otorga insumos sanitarios como gel antibacterial, cubrebocas, guantes y caretas, pese a que atienden de manera personal a cientos de contribuyentes.
Esto porque el Ayuntamiento de Puebla prioriza la recaudación de recurso público sobre la salud de sus propios trabajadores que ya se han contaminado y continúan laborando por el miedo de ser despedidos, tal como sucedió en el Juzgado Norte, donde murió Pedro Marlon Echeverría Pérez.
“Está llamando a mucha gente de la tercera edad, estamos en un área donde no nos dan artículos de protección como cubrebocas, guantes, además hay represalias que si te retiras o tienes una enfermedad como hipertensión o diabetes y no eres sindicalizado, te piden la renuncia”, narró el trabajador, quien solicitó el anonimato por las mismas razones.
Los trabajadores relataron que la dependencia hace caso omiso a las circulares enviadas por la Secretaria de Administración, donde pide que los trabajadores con alguna enfermedad no se presenten a laborar; aunado a esto, los jefes que hacen reuniones con los contribuyentes no utilizan cubrebocas.
“Nuestros jefes no utilizan cubrebocas y realmente es de miedo ir a trabajar, no quieren darnos los días de guardia que circula la Secad, bajo el pretexto de que son una dependencia esencial, ya que lo único que importa en esta temporada es la recaudación y no tenemos seguridad de nada”, narró un funcionario de primer nivel.
Además relataron que los dos edificios de la Tesorería se han convertido un foco rojo, porque al día reciben más de 200 personas que tampoco respetan las recomendaciones de Protección Civil del estado para evitar contagios.
Cabe destacar que fuentes al interior del gobierno municipal revelaron que la contadora María Elena Méndez Romero falleció a causa de esta enfermedad, luego de presentar síntomas al contagiarse en su trabajo y no ser separada de sus actividades
La tesorería cuenta con una fuerza laboral cercana a 150 personas, de las cuales se sabe que ya se contagiaron cinco; sin embargo, los trabajadores acusan que han existido más casos.
Esta dependencia no es la única que ha presentado esta situación, pues la Sindicatura Municipal enfrenta una investigación por parte de la Comisión de Derechos Humanos del Estado, por haber obligado a laborar por 27 días al ex secretario de juzgados Pedro Marlon Echeverría, quien falleció el 5 de febrero a causa de coronavirus.
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Ricardo Juárez
@RicardoJuaAlma