En un principio, el barrio de Analco comprendía las calles de la 8 a la 14 sur así como de las avenidas 5 a la 11 Oriente, limitaba por el oriente con sembradíos.
En 1618 fue construida la Iglesia de Santo Ángel Custodio y se empedraron las calles con piedra de cantera. En 1759 se instaló una fuente en el centro de la plazuela que fungió como abastecedora de agua potable para los habitantes.
A finales de 1970 se instaló un jardín en donde antes se encontraba la plazuela empedrada, desde entonces en dicha zona se ha instalado cada fin de semana un tianguis donde se ofertan artesanías, antigüedades y comida típica.
Otro emblemático sitio es el puente de Ovando que es el único referente de este barrio el cual permitía el cruce del río San Francisco, el puente fue nombrado así por estar cerca de la casa del regidor Agustín de Ovando y Villavicencio.
Este puente, además separaba a los mestizos quienes eran la clase humilde, de la “traza española” quienes eran los más adinerados en ese entonces.
Este barrio cuenta con una de las más conocidas leyendas de Analco es la “Del Callejón del Muerto”.

Claudia García S
@Diario_Cambio