San Pedro Cholula.- La rampa de ascenso al santuario de la Virgen de los Remedios está en riesgo de presentar hundimientos por los huecos que están abriendo debajo las ardillas que han invadido el Tlachihualtepetl, cerro hecho a mano, que cubre a la gran pirámide.
Es un “problema tremendo” que debe solucionarse pronto con apoyo de las autoridades para prevenir afectaciones a esta escalinata utilizada por cientos de personas todos los días, consideró el administrador de la zona arqueológica, Martín Cruz Sánchez.
La presencia de este tipo de roedores es generalizada en el resto del cerro que cubre la gran pirámide, en los alrededores del santuario de la Virgen de Los Remedios, en la zona abierta de la zona arqueológica e incluso han comenzado a aparecer en el Museo Regional.
Sin embargo, las madrigueras, tanto de ardillas como de tuzas, se concentran bajo la rampa que actualmente está cubierta de laja negra que, a su vez, fue colocada sobre piedra de bola que se encontraba originalmente en la escalinata, explicó.
Si los huecos formados por las madrigueras siguen creciendo, el ascenso comenzará a sufrir deformaciones, desniveles y finalmente hundimientos. Por eso, es necesario retirar a las ardillas para comenzar a rellenar los agujeros y evitar mayores daños, consideró.
En entrevista, el administrador de la zona arqueológica dijo que hasta el momento no han funcionado los programas de reubicación porque la población de roedores crece en una mayor proporción a su captura y liberación en sitios acordes a su hábitat natural.
De manera que el gobierno de San Pedro Cholula propone la intervención de especialistas de las universidades para tratar de disminuir la cantidad de estos animales, a través de un programa de control de natalidad.
Martín Cruz Sánchez reconoció que es difícil reducir la cantidad de ardillas porque los visitantes las alimentan e incluso las vienen a dejar si en algún momento las tenían como mascotas.
También esta especie es muy inteligente y evita las trampas, además que son defendidas por algunas sociedades protectoras de animales, a pesar de que hasta el momento no se les ha hecho daño y su presencia ha puesto en riesgo el patrimonio arqueológico.
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Myrna Rojas Flores
@Diario_Cambio