La unidad es fundamental para recuperar la seguridad de Puebla y seguir con el segundo piso de la transformación, declaró Alejandro Armenta Mier en su mensaje político, ante cientos de simpatizantes, después de su registro como candidato a gobernador de Puebla ante el Instituto Electoral del Estado (IEE).
Este fin de semana Alejandro Armenta Mier y José ‘Pepe’ Chedraui completaron su registro ante el órgano electoral como candidatos a la gubernatura y la presidencia municipal, respectivamente.
A la presidenta del Consejo General del IEE, Blanca Cruz García le pidieron garantías en la jornada electoral, en tanto, los morenistas se comprometieron a realizar una campaña de propuestas.
“Tenemos claridad de rumbo (…) nos mueve servir y entendemos que vamos a un proceso democrático confiamos en las autoridades electorales”, puntualizó Armenta.
Su mensaje entre un ambiente festivo y de testigos los presidentes de los partidos Morena, Verde Ecologista, Nueva Alianza, PT y Fuerza por México.
Alejandro Armenta recordó que Puebla es un estado cosmopolita y que sueña en grande para vivir mejor. Pero solo la unidad logrará hacerlo realidad.
Por eso decidió que su registro se hiciera junto con el aspirante a la presidencia municipal de Puebla, José ‘Pepe’ Chedraui, para que juntos atiendan las necesidades sociales.
“Nunca más a la inseguridad, nunca más al abandono de las juntas auxiliares. Nunca más a la privatización del agua para beneficiar a algunos cuántos”, señaló al dirigirse a Pepe Chedraui.
Reiteró que la unidad de los aspirantes a puestos de elección popular, los liderazgos, militantes y el pueblo en general ayudará para materializar los sueños y las aspiraciones legítimas de miles de personas que confían en las fuerzas políticas de la cuarta transformación.
José ‘Pepe’ Chedraui también destacó que el proyecto buscará mejorar las condiciones sociales, más empleo, seguridad y de respuestas a las demandas ciudadanas.
Ambos morenistas enviaron un mensaje de agradecimiento a sus familias que estuvieron acompañándolos en el evento protocolario hasta el templete que sirvió de escenario para tomarse la foto oficial.