Javier Sicilia, luego de presentarse en la Feria Nacional del Libro de la Universidad La Salle, el activista destacó que la violencia emprendida por el magisterio y alumnos universitarios demerita su movimiento.
"Hay argumentos de los maestros que tienen razón, el problema es que los argumentos no se defienden con violencia, eso los saca de su razón y entonces cuando vemos esos actos de barbarie o esos actos de violencia, producto de un largo enojo que traemos todos los ciudadanos porque estamos verdaderamente en el desastre, pues opaca las razones que pueden tener por oponerse a la reforma educativa", dijo en conferencia de prensa.
"Yo los llamo a que no hagan esos actos de barbarie porque nos indigna a los ciudadanos y si pudiéramos tener alguna simpatía con ellos, ese tipo de cosas no los descarta, simplemente los va a encajonar más".
Sicilia se pronunció a favor de que autoridades de la UNAM dialoguen con los estudiantes que tienen tomada la sede de la Rectoría.
"Lo mismo sucede con la UNAM, están haciendo muy mal las cosas, ¿qué hay que hacer?, llamarlos a la razón y a la ética y a la no violencia y a la lucha digna, pero no por eso tenemos que mover ciertas demandas", comentó.
"Los llamamos a la cordura, a la democracia, al sentido de una lucha con dignidad para que podamos oír sus palabras, para que sus palabras tengan lugar y no nada más exhibir la parte bárbara, tomar esa parte por el todo de las demandas, yo creo que hay que tomarlo con mucho cuidado porque el País está al borde del incendio, está incendiado por la abdicación del Estado para cumplir con su cometido fundamental que es la seguridad y justicia de los ciudadanos, que está rota producto de la barbarie y el horror por parte del crimen y el horror por parte de las Fuerzas Armadas".
A pregunta expresa, el poeta criticó al Presidente Enrique Peña Nieto por dar el espaldarazo a la Secretaría de Desarrollo Social, acusada por el PAN de tener responsabilidad en el presunto manejo de programas sociales en Veracruz con fines electorales.
"Peña Nieto parecía venir con mente de estadista, pero después de los sucesos con Rosario Robles resulta que se nos volvió defensor de mapaches. Hay que exigirle a Peña Nieto que tenga la altura con la que entró y que si va a castigar, como lo hizo con Elba Esther (Gordillo), hay otros delincuentes que no se puede estar solapando, para no mandar mensajes delincuenciales", señaló.
"Peña Nieto empieza a desdibujarse como estadista y hay que preocuparse, (porque) cuando los estadistas empiezan a perder, tenemos delincuentes como ya vimos con (Felipe) Calderón".
