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Sus pasos son incansables. Son kilómetros tras kilómetros que los familiares que tienen a sus hijos desaparecidos caminan para exigir la presentación vivos de esos 43 que hoy todo el mundo clama porque aparezcan.
Un día después de la megamarcha nacional y mundial por los 43 normalistas de Ayotzinapa, nuevamente el jueves unas dos mil personas partieron de la normal rural Raúl Isidro Burgos hacia Chilpancingo en una caminata-peregrinación.
En punto de las 12:00 horas iniciaron su caminata.
Tras andar por alrededor de seis horas llegaron a la capital, Chilpancingo, para exigir justicia, un día antes de que se cumpla el plazo que dieron a las autoridades. Casi a la par de su arribo, el gobernador Ángel Aguirre anunció que pedía licencia a su cargo.
A su paso los pobladores se solidarizaron con ellos y les regalaron agua y comida. DE
