Mientras padres de los normalistas de Ayotzinapa desaparecidos realizaban un mitin afuera de la residencia oficial Casa Guerrero, un grupo de manifestantes hizo pintas en las paredes del inmueble que había quedado sin vigilancia.

Entre las leyendas escritas están "Vivos se los llevaron vivos los queremos", "Aguirre asesino" Presentación con vida de normalistas" y "Ortega títere del gobierno".

Antes de iniciar el mitin, los padres y los maestros que los acompañaron en marcha desde el Zócalo pidieron a Rosa Icela Ojeda, esposa del Gobernador Rogelio Ortega, que abandonara el lugar, a lo cual ella accedió.

Ojeda estaba en el inmueble cuando arribó el contingente de inconformes y ofreció dialogar, propuesta que fue rechazada.

Tras la salida de Ojeda, un grupo de manifestantes entró al lugar a hacer las pintas.

En las instalaciones no había empleados ni policías ni guardias, y prácticamente el edificio quedó en manos de los inconformes.

Una madre de un joven desaparecido desde el pasado 26 de septiembre en Iguala, Guerrero, dijo que la presencia de la esposa del Gobernador era un burla y una trampa y que ellos no quieren dialogar con el Gobierno, lo único que piden es que sus hijos sean liberados.

La mujer también exigió la renuncia del Presidente Enrique Peña y todo su Gabinete.

"Que todos se vayan a chingar a su madre", dijo.

Tras el miin, los manifestantes se retiraron del lugar.

Fuente: Reforma