La economía mexicana crecerá menos a lo previsto en 2015 y 2016, debido al bajo consumo privado, a la caída del precio del petróleo y a los ajustes fiscales emprendidos por el gobierno federal, pronosticó Banco de México (Banxico).

“La Junta de Gobierno ha decidido revisar a la baja los intervalos de pronóstico para el crecimiento del producto interno bruto (PIB) en 2015 y 2016, particularmente por el efecto del precio del petróleo a la baja que ha generado volatilidad y ha afectado algunas inversiones”, afirmó Agustín Carstens, gobernador del Banxico.

Según el responsable del banco central, el entorno macroeconómico reportado en este momento es menos favorable a lo previsto a finales del año pasado.

Tampoco se ha podido revertir la tendencia en la caída de la plataforma de la producción petrolera, además de que el consumo privado no ha mostrado señales claras de tomar un mayor dinamismo, declaró el responsable de la política monetaria.

En 2014, el PIB registró una tasa de expansión de alrededor de 2.1 por ciento, como reflejo del impulso de la demanda externa y de cierta mejoría en la demanda interna respecto al año previo, dijo el economista. El próximo viernes 20 de febrero, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía dará a conocer el resultado final de cuánto creció la economía mexicana en 2014, un año donde se dieron varios recortes.

“Para 2015 y 2016, se continúa anticipando un crecimiento mayor al de 2014”, el cual estará por debajo de lo anticipado, recordó durante la presentación del Informe trimestral, octubre-diciembre 2014.

El pronóstico para la tasa de expansión del PIB de México en 2015 se ajusta a un intervalo de entre 2.5 por ciento y 3.5 por ciento, desde un rango de entre 3 por ciento a 4 por ciento previsto en el informe de inflación del tercer trimestre de 2014.

"Para 2016, se prevé cierta persistencia en las dificultades para el entorno macroeconómico, de modo que se anticipa que la tasa de crecimiento del PIB se ubique entre 2.9 por ciento y 3.9 por ciento, intervalo que se compara con uno de entre 3.2 por ciento y 4.2 en el Informe precedente", comentó el ex secretario de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

Manifestó que el deterioro en el entorno externo, así como esta evolución de los mercados financieros en México, hizo evidente que era necesario un eventual ajuste en la postura macroeconómica en el país.

“Ello, debido a que este cambio facilitaría la transición de la economía mexicana a una nueva circunstancia externa y contribuiría a evitar una posible situación de astringencia financiera derivada de dudas en torno a la sostenibilidad de la deuda pública y de las cuentas externas”.

También, Grupo Financiero Banamex recortó sus previsiones de crecimiento para este y el otro año, especialmente por el ajuste de 124 mil millones de pesos anunciado por Hacienda a finales de enero pasado.

“Dado el anuncio del gobierno federal de un recorte del gasto público para 2015 como medida preventiva, optamos por revisar a la baja nuestro pronóstico de avance anual del PIB en 2015 a 3.0 por ciento desde 3.4 por ciento previo”, informó la institución bancaria.