Thursday, 02 de May de 2024


¿Por qué los demás no meten a su Chapo a prisión?




Escrito por  Jesús Ramos
foto autor
Todos tienen un Chapo que meter a la cárcel. Enrique Peña Nieto ya metió al suyo, pero ¿y los demás? La iglesia, por ejemplo, pudo hacerlo con los padres Maciel y Nicolás Aguilar, y no lo hizo; el PAN, PRI y PRD pueden hacerlo con los legisladores, alcaldes y gobernadores corruptos y tampoco lo hacen; y los mandatarios estatales en funciones, pueden meter a su Chapo en sus antecesores ladrones o en algunos integrantes de su gabinete y se abstienen de hacerlo.

¿Por qué ocurre esto? ¿Por qué quienes tienen la oportunidad de meter a los delincuentes a la cárcel no lo hacen? ¿Por qué apresan a los peces chicos y dejan libres a los peces gordos? ¿Por qué los partidos políticos en lugar de denunciar a los que roban al pueblo, a los caciques, a los prepotentes, a los autoritarios y a los sinvergüenzas los protegen? ¿Por qué?

 

 

La afirmación es correcta, los bonos de Peña Nieto se fueron a los cuernos de la luna con la captura de Joaquín Guzmán Loera, ¿no sería lo mismo si los partidos políticos pusieran tras las rejas a sus Chapos?, ¿no confiaría más la gente en los institutos políticos en los que hoy por hoy no confían?, ¿no depositarían más fe los feligreses en su iglesia, cual quiera que esta fuese?

 

 

Chapos hay por todas partes y en todos lados, pululan en los sindicatos, en los partidos políticos, en el espectáculo, en el deporte, en el gobierno, etcétera, etcétera, etcétera, y lo peor del caso es que esos Chapos en lugar de andar a salto de mata se exhiben en público, cortan listones inaugurales, conducen vehículos lujosos, visten trajes caros, aparecen en portadas noticiosas, salen en la televisión dando entrevistas, repiten en cargos públicos y ni quién los moleste ni les haga nada.

 

 

Juan José Rodríguez Prats, panista admirado por quien esto escribe, por ejemplo, ha dicho más de una vez que Gustavo Madero y Luis Alberto Villarreal son gente corrupta y ladrona, y sin embargo uno es dirigente del PAN y el otro coordinador de los diputados federales de ese partido. ¿Por qué si son lo que son no visten a rayas y están recluidos? ¿O por qué no los han expulsado del partido que fundó Gómez Morín?

 

 

¿Cuántas veces han señalado de ladrón a Humberto Moreira y de haber vaciado las arcas de Coahuila cuando fue gobernador de ese estado y a pesar de ello sigue libre? En Puebla también hay Chapos que meter a prisión. Y no uno, muchos. Hay Chapos en la mayoría de los municipios, de las regiones de la entidad, de los partidos, de las instituciones y si lo hicieran también sus bonos se fueran a la luna. Sin embargo en vez de eso, los hacen diputados o alcaldes, no una sino muchas veces, o les dan huesos en la administración pública municipal, estatal o federal.

 

 

Los Chapos más perjudiciales para la sociedad no son los señalados por la DEA, el FBI, la KGB, la interpol o el MI6 de Inglaterra, no son los que trafican con drogas y armas sino los que están cerca de nosotros y se roban los presupuestos públicos de la clínica que no se construyó, la carretera que no se encarpetó, la calle que no se hizo, las luminarias que no se pusieron, los sobreprecios que se aplicaron en obras y adquisiciones, el suministro de agua que se olvidó, las despensas que se guardaron en las bodegas para las campañas electorales y que se echaron a perder y aquellos Chapos que eternizaron a sus familias en los puestos de elección para vivir del presupuesto. Esos Chapos sí que son, por mucho, más peligrosos y dañinos que el tal Guzmán Loera. ¿O no?

 

 

 

 

Valora este artículo
(0 votos)
comments powered by Disqus