El delegado de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) Carlos Hernández Hernández confirmó que le siguen llegando quejas por parte de automovilistas que señalan que en los centros de verificación de la capital les solicitan  dinero antes de brindarles el servicio, pero aclaró que corresponde a la PGJ investigar posibles actos de corrupción.

En lo que respecta a su delegación, indicó que se han montado operativos de revisión, y precisamente este miércoles se llevó a cabo uno en el que se ubica en Bulevar Atlixco tras una llamada de un usuario que denunció que le pidieron un pago anticipado.

Actualmente, en tres de los verificentros continúan colocados sellos de prevención debido a que las empresas están en etapa de solventar observaciones hechas en semanas pasadas por quejas de abusos y falta de información clara.

Dejó en claro que cualquier centro que incumpla con la Ley del Consumidor puede ser acreedor de multas que van desde  617 pesos hasta dos millones de pesos.