El secretario general de Gobierno, Luis Maldonado Venegas, salió al paso de las acusaciones de represión e intimidación en contra del morenovallismo por la detención de tres opositores al gasoducto Morelos, y entrevistado por la periodista Carmen Aristegui, negó que hayan sido detenciones arbitrarias ya que fueron funcionarios de la Comisión Federal de Electricidad los que presentaron las denuncias ante la Procuraduría General de Justicia (PGJ). Justificó, además, que el 97 por ciento del tramo del gasoducto que atraviesa el suelo poblano ya ha sido negociado con los propietarios.
Sin embargo, el funcionario estatal rechazó tener un debate en vivo en el espacio radiofónico de MSV con la diputada federal Roxana Luna Porquillo y argumentó que tenía que abordar un avión en ese momento: “estoy teniendo que subir a un avión, supongo que ella va a ratificar su punto de vista”, aseveró Luis Maldonado.
Las detenciones de Abraham Cordero, Enedina Rosas y Juan Carlos Flores, dijo, son procesos debidamente integrados en los que se les está acusando de robo calificado, destrucción de maquinaria y equipo propiedad del gobierno federal; afectación a infraestructura hidráulica, retención de autoridades y de trabajadores “que estuvieron privados de su libertad por estos dirigentes, que tuvieron que ser rescatados a punto de ser linchados”.
Confirmó que la Organización de las Nacionales Unidas está vigilando que se respeten los derechos humanos de las personas aprehendidas, para lo cual el gobierno estatal está entregando toda la información sobre los casos.
“Las acusaciones son denuncias formales que han presentado particulares, miembros de comunidades y autoridades de carácter federal, funcionarios de la Comisión Federal de Electricidad; no está en nuestro ámbito, como tú lo sabes no podemos actuar discrecionalmente cuando aplicamos o no la ley”.
En torno al investigador de la BUAP, Ricardo Pérez Avilés, quien ha denunciado acoso del gobierno estatal, Luis Maldonado apuntó que le ofrecieron garantías al académico en torno a su seguridad y le expusieron que en puebla no hay una orden de aprehensión en su contra, sino en Tlaxcala, en donde se le ha iniciado el procedimiento.
“Se están atribuyendo una serie de señalamientos y de descalificaciones al gobierno de Puebla, en las que no tenemos nosotros parte. Nosotros queremos aclarar que no hay ninguna acción que esté en curso, porque se sembró temor en el ámbito de la universidad, y no hay acción que tengamos en este momento”.
Tras más de 10 minutos de entrevista con Aristegui, la periodista le preguntó si tenía algún inconveniente con que se iniciara un debate con Roxana Luna, sin embargo el morenovallista rechazó la propuesta.
“Había reportado que tenía que subir al avión a las 9, Roxana mantendrá su punto de vista. Ella es una de las expresiones vivas, ella lo ha podido hacer libremente, expresarse, siempre sus discursos han sido sistemáticos en contra de muchas cuestiones, es su derecho y es el espíritu de libertad que reina en Puebla”, sentenció.