No me extraña la corrupción en Puebla: Xóchitl Gálvez


Asegura ex funcionaria que en Puebla hay obras de mala calidad


“No se me hace descabellado ese lugar, porque yo vi cosas muy complejas en Puebla, como obras de mala calidad”, sentenció sobre el cuarto lugar que ocupa el estado en corrupción


Olivia López Pescador

 

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Xóchitl Gálvez Ruiz, ex comisionada nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas, aseveró que no le extraña que Puebla ocupe el cuarto lugar en corrupción, ya que como en cualquier estado hay obras de mala calidad y otras irregularidades, pero para combatir esto debería trabajarse en un consejo ciudadano para focalizar los problemas, determinar qué municipio es más corrupto y combatirlo, esto lo señaló tras dictar una conferencia sobre la mujer en UAP.


“No se me hace descabellado ese lugar, porque yo vi cosas muy complejas en Puebla, como obras de mala calidad, en donde la autoridad no le reclamaba a las empresas las fechas de entrega calidad o precios inflados, porque quizá estaban involucrados en las irregularidades, como sucede en otros estados del país.”


Indicó que pese a que ya hay páginas de transparencia en la Federación, el problema de corrupción radica en los estados y municipios. “El cambio de partido no ha sido ninguna garantía de que se haya acabado la corrupción en el Gobierno federal, porque los funcionarios son los mismos, pero no sólo se da en este ámbito, sino también en el sector empresarial. Según un estudio de Transparencia Mexicana, 3 por ciento del PIB se va en corrupción.

 

Los Congresos de los estados deben dejar de ser comparsas de los gobernadores, pero con los carros completos que se llevan, la aprobación de las cuentas públicas sólo se trata de un trámite, porque ni las revisan, a diferencia del Gobierno federal, en donde sí ve la división de poderes.”


Al cuestionarle sobre la política social “Vivir Mejor” del gobierno federal, indicó que al igual que los otros programas de Solidaridad y Progresa no hay nada que inventar, lo interesante de este último programa es el desarrollo económico, pero es necesario que los empresarios contribuyan en las regiones, pero no para explotar a la gente, sino para ayudarla”.


No obstante que señaló que es una mala apuesta de los políticos que siguen tratando de comprar consciencias con despensas durante los tiempos electorales, indicó que tal parece que esto sigue funcionando, como sucedió en Puebla e Hidalgo.


Xóchitl Gálvez remarcó que el desarrollo de los pueblos indígenas tiene mucho que ver con que los alcaldes en verdad ejerzan el Ramo 33 y los gobiernos estatales apliquen los excedentes petroleros.


Dejó en claro que la corrupción está en el inconsciente colectivo de los mexicanos, “porque la corrupción no sólo se trata de robarse el dinero, sino llevarse pequeñas cosas, hacer las obras de mala calidad y no cumplir con los tiempos de entrega”.


La ex funcionaria federal del sexenio foxista —en presencia de la vicerrectora de Extensión y Difusión de la Cultura, Lilia Cedillo Ramírez y de la titular de la Dirección de Administración Escolar de la institución, Laura Gómez Aguirre—, al recordar sus orígenes y su infancia transcurrida en un pueblo indígena del Valle del Mezquital, Hidalgo, en donde “las mujeres no valían nada y no les permitían participar en las asambleas”.


Con su tradicional estilo para decir las cosas como son y con picardías, señaló que quizá su caso sea el de una mujer atípica, en la que el padre era alcohólico y su madre una mujer que sufría de violencia física, aún así logró estudiar la carrera de Ingeniería en Sistemas Computacionales en 1978 en la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM); lo que le permitió ser una empresaria de éxito, a pesar de que en un principio era discriminada por su condición indígena, de pobreza y por ser mujer. Indicó que para salir adelante, sólo es cuestión de actitud.

 

Recordó que antes de entrar a la política en el gobierno federal, al renunciar a una empresa por no soportar que discriminaran a otros indígenas, eso fue lo que la impulsó a crear su propia empresa High Tec, con la que bien pudo haberse vuelto millonaria, pero decidió mejor vivir bien y ayudar a los más necesitados con una fundación para apoyar a niños desprotegidos. Comentó a los presentes Xóchitl Gálvez, que aunque fue invitada por Vicente Fox a la Secretaría de Desarrollo Social, decidió no aceptar, sino mejor trabajar con los pueblos indígenas.

 


 
 
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