El arzobispo va al Cereso

Huesca crítica las condiciones en las que se encuentran los internos

Olivia López Pescador

Luego de realizar una visita al Cereso de San Miguel, Rosendo Huesca y Pacheco, arzobispo de Puebla, manifestó que aunque los presos en este reclusorio no están en las mejores condiciones, porque ese inmueble fue diseñado para mil 200 personas y hay 3 mil 300, sí se han hecho algunas adecuaciones para atenderlos, indicó que no percibió nada anormal durante su estancia, ya que acudió el día destinado para la visita familiar.

“Quienes purgan una condena, afortunadamente ya tienen la posibilidad de estudiar ahí, de recibir auxilio espiritual y una vez que son dejados en libertad, la orden de La Merced se encarga de apoyarlos para su integración a la sociedad, brindándoles asilo y trabajo; ya que este grupo de religiosos está siguiendo la obra que alguna vez llevó a cabo la madre Felipa con los presos.”

Durante su tradicional conferencia de prensa dominical —después de oficiar la misa de 10 de la mañana por las personas que se encuentran presas— Rosendo Huesca comentó que durante la visita anual que realiza al Centro de Readaptación Social para conocer en qué condiciones se encuentran los presos, reconoció que le llena de angustia que, independientemente del delito que hayan cometido, por la pérdida de la libertad no puedan ocuparse de sus familiares.

Al realizar una visita el sábado pasado, comentó que desafortunadamente se está incrementando el número de mujeres que purgan una condenada. “Hace 30 años, aproximadamente, mientras había 12 mujeres recluidas y mil 200 hombres, hoy en día se ha acrecentado el número de ellas a 280, esto se debe a que están participando en los fraudes bancarios y hasta en cuestiones de narcomenudeo, porque los ‘dizque novios’ las están convenciendo, que participen en estos ilícitos para hacer su ‘cochinito’, pero cuando las pescan, siempre las dejan solas y huyen con el dinero.”

No obstante que el arzobispo de Puebla reconoció que las condiciones que se tienen en el Cereso no son las mejores, comentó que se están haciendo muchos esfuerzos, ya que se tiene un convenio con el Tecnológico de Monterrey, para que de manera virtual, con la ayuda de computadoras individuales, los reclusos cursen diplomados.

Señaló que la única área a la que no pudo entrar, es en la zona restringida, ya que ahí se encuentran los presos que “se han portado muy mal”.

Al preguntarle al arzobispo sobre el proyecto que manejaba la madre Felipa para los presos que dejaban el Cereso, respondió que ya se terminó éste porque las siervas del sagrado corazón de Jesús y de los pobres ya no pudieron afrontar esa obra, por ello decidieron acudir a los padres mercedarios, cuya vocación de origen es trabajar por los presos, por ese motivo esta orden religiosa se está encargando de esta obra.

“Estoy yo por escribirle al provincial para pedirle una información, no por control, sino para estar informado sobre cuál es el programa que piensan desarrollar”, esto lo comentó tras recordar que este proyecto cuenta por lo menos con una hectárea de terreno con casas e infraestructura, para apoyar a quienes dejan la cárcel.

Después de que hace unos días les llevó a los presos 100 roscas de reyes, reveló que por lo menos 10 presos le dieron una carta, sin embargo todavía no ha tenido la oportunidad de leer el contenido, indicó que ha venido estudiando desde hace tiempo algunos casos de reclusos que no tienen ni para pagar una pequeña fianza, por ello es que están tratando de ayudar a estas personas.

En cuanto a la vida espiritual de los reclusos, comentó que así como acuden los cristianos y los evangélicos a dar su doctrina, también acuden grupos católicos a evangelizar, sólo les han pedido en la prisión que no vistan de negro, no usen celular y que sólo lleven el libro con el que van a enseñar, no obstante no muchos presos se interesan.

La Iglesia también cuenta con 20 mujeres del grupo de la pastoral penitenciara de la diócesis, quienes acuden una vez a la semana con las mujeres que están privadas de su libertad.

Finalmente comentó, en cuestiones pastorales, que el viernes pasado ordenó a seis diáconos: Sergio Espinoza (San Rafael Iztapaluca, de la parroquia del Verde; Mucio Cruz (Tecamachalco), Chistopher Cortés (ciudad de Puebla), Francisco Manuel Aguilar (ciudad de Puebla), José David Díaz (ciudad de Puebla), Rodrigo Castro (ciudad de Puebla).