Monopoliza, encarece, la subsidian... ¡y pierde!


Este año la paraestatal recibirá subvención del gobierno federal por $34 mil millones



Alma Hernández / Agencia Reforma


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A pesar de que tiene el monopolio en la distribución de electricidad en la zona centro del País y de que recibe subsidios millonarios por parte de la federación, Luz y Fuerza del Centro (LFC) no puede contener los robos ni dejar de perder dinero.


En los primeros tres trimestres del año pasado, la paraestatal reportó pérdidas netas antes de subsidios por 27 mil 500 millones de pesos y se estima que en todo el año pasado sus números rojos lleguen a 37 mil millones de pesos.


Cada año, tan sólo la empresa reporta pérdidas totales por robo de 34 mil millones de pesos, cifra equivalente a lo que recibirá este año por subsidios del Gobierno federal, según el Presupuesto de Egresos de la Federación.


Adicionalmente, los industriales tendrán que pagar tarifas de alta tensión hasta 8 por ciento más elevadas que las del año pasado, en consumos que no forman parte del "horario punta", es decir, 20 horas que van de las 0:00 a las 18:30 horas y de las 22:30 a las 24 horas.


En 2008, la empresa recibió una asignación extraordinaria por mil 500 millones de pesos para fortalecer el sistema de transmisión y distribución, que implica reforzar redes para evitar robos, cuyos proyectos deberán ser aprobados por la Secretaría de Energía.


En paralelo, la Secretaría de Hacienda autorizó otra partida de 100 millones de pesos anuales en promedio para sustituir y fortalecer líneas de transmisión. Sin embargo, la empresa tiene un presupuesto insuficiente y necesidades crecientes de demanda eléctrica por crecimiento excesivo de algunas zonas, destacó Edmundo Gil Borja, subdirector de Distribución de la empresa.


Por ejemplo, las prioridades de la empresa son garantizar el abasto en zonas como la delegación Benito Juárez y Polanco, donde se tiene un crecimiento explosivo de viviendas, con edificios hasta de 120 departamentos en terrenos que antes eran unifamiliares.


Empero, el funcionario aseguró que está garantizado el abasto eléctrico mediante la programación de obras para disminuir los tiempos de suspensión del suministro eléctrico.


Sobre el problema del robo a través de "diablitos", tan sólo en el Distrito Federal, a la paraestatal le robaron el equivalente a 13 mil millones de pesos en 2007, informó Gil Borja.


Este monto representa el 18 por ciento de toda la electricidad facturada en el Valle de México y la zona conurbada.


Para reducir las conexiones ilegales, el organismo inició una nueva campaña de sustitución de medidores e incentivos al personal que reporte la localización de los denominados "diablitos", con la que pretende reducir en 20 por ciento éstas pérdidas.


Dichas acciones fueron establecidas en la revisión salarial de 2007 con el Sindicato Mexicano de Electricistas (SME), que dirige Martín Esparza.


El acuerdo, fue firmado por el líder sindical, el director de la empresa, Jorge Gutiérrez Vera, y la secretaria de Energía, Georgina Kessel, pero hasta la fecha, el índice de robos y pérdidas técnicas (electricidad que se queda en el cable por ineficiencias de la red) no han bajado.


Agregó que para evitar robos en las redes aéreas de la empresa, se están pasando algunos tramos a ductos subterráneos.


Como parte del programa de mejoramiento de las líneas de transmisión y distribución la empresa está haciendo trabajos de reingeniería para repartir la carga y aprovechar la capacidad en zonas con baja demanda, y distribuirla hacia sitios de mayor demanda.


 
 
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