No hubo golondrinas para Pacheco Pulido

Da su último informe y omite una despedida oficial del Tribunal

Un adiós sin emociones el del magistrado presidente en Ciudad Judicial, que careció de largas ovaciones, de aplausos o porras. Y más, no hubo fila para el último besamanos

Edmundo Velázquez

Guillermo Pacheco Pulido omitió una despedida oficial en su último informe de labores como presidente del Tribunal Superior de Justicia, el cual transcurrió con mensajes cómodos de sus magistrados pretorianos y el pequeño reconocimiento del gobernador Mario Marín Torres.

Fue un adiós sin emociones el de Pacheco Pulido en Ciudad Judicial, careció de largas ovaciones, de aplausos o porras, ni una fila hubo siquiera para el último besamanos del magistrado presidente.

Eso sí, Pacheco salió apurado. Entre empujones bajó del presidium, salió acompañando al gobernador Marín, descendió al estacionamiento de Ciudad Judicial y partió con rumbo al tercer informe de Margarita García como presidenta del Sistema Estatal DIF.

En Ciudad Judicial se quedaron Alfredo Mendoza y Gerardo Villar Borja, magistrados que pocas oportunidades tienen ya para suceder a Pacheco, pero ambos en salutaciones adelantadas.

El mensaje político

La defensa del Tribunal, el verdadero mensaje político de la presidencia de Guillermo Pacheco Pulido, lo expresó el magistrado Fernando Humberto Rosales Bretón, titular de la Tercera Sala Penal.

Rosales Bretón subrayó que la opinión pública no puede ser engañada por aquellos inconformes de la justicia, denostando así el papel del juez o magistrado.

“… debemos dar cuenta a la sociedad, para que sea ella, en su conjunto, quien nos ubique en el lugar que merezcamos, y no como excepcionalmente sucede, por algún inconforme que, vencido en una contienda legítima, trate de ganar el pleito abriendo una ulterior instancia mediática para confundir a la opinión pública, ocultando en una malentendida ‘gracia del anonimato’ su carácter de parte, presentándose como un desinteresado campeón de la justicia, vistiendo, sin calidad moral alguna, la túnica de tribuno del pueblo lanzando un ‘yo acuso’, denostando a quien pronunció un fallo contrario a sus intereses, deformando tendenciosamente su contenido.”

El magistrado Rosales insistió que actualmente la justicia vive un momento de desconfianza, por lo que cada vez es más difícil la tarea del juez:

“Nadie duda que nuestra época vive bajo el signo de la inquietud y el escepticismo; el derecho no se ha escapado a esa incredulidad y la justicia se considera frágil e insuficiente. Aciertan, los que piensan que el juzgador, al aplicar el derecho vive en permanente angustia, frente a la incomprensión que frecuentemente nos agobia; sin embargo, tenemos a cambio la compensación que deriva de haber ofrecido mayores posibilidades al imperio de la ley, como el mejor instrumento generador de paz social.”

Ante los invitados al informe de Guillermo Pacheco Pulido, Rosales recalcó que el ambiente de desconfianza desde la opinión pública es desfavorable para el Poder Judicial de Puebla:

“No es extraño que, como en épocas pasadas, se hable de corrupción de una manera genérica, sin pruebas y sin seriedad alguna. Desgraciadamente el resultado de esos comentarios, es que se va creando un sentimiento de desconfianza en la justicia, y en ese ambiente no es ciertamente el óptimo para una correcta administración de justicia.”

Además pidió a los presentes que se evaluara la situación actual de “paz social” que vive Puebla, esto en comparación con otras entidades federativas que sufren “graves conflictos violentos”, esto en alusión al ambiente generado por el narcotráfico.

Previo a Rosales Bretón se presentaron los mensajes de las magistradas Margarita Palomino Ovando y Elba Rojas Bruschetta. Cada una presentó los avances en materia de carrera judicial y tecnológica del Tribunal Superior de Justicia en el periodo 2007-2008.

Un adiós sin sabor

El presidente Pacheco Pulido tuvo una intervención mucho más corta. Le tocó turno cuando el mensaje de Rosales Bretón finalizó. Fue parco, sencillo y breve. Incluso bromeó y arrancó una carcajada cuando comentó que hasta de pariente terminó con el arzobispo Rosendo Huesca y Pacheco.

“El desarrollo de las actividades del Poder Judicial del estado de Puebla han sido positivas y por razón lógica apegadas a la ley. Es cierto que se mantienen problemas estructurales y coyunturales, sin embargo se han tomado medidas correspondientes por el Pleno del Tribunal Superior de Justicia a fin de enfrentar dicha problemática (…) Nunca se podrá estar satisfecho aunque sea mucho lo logrado frente a tanta problemática”, mencionó en el breve mensaje Guillermo Pacheco Pulido.

Al final el gobernador Mario Marín Torres tuvo el detalle de reconocer al magistrado, de elogiarlo y convocar a un reconocimiento de los presentes. Un aplauso que fue cortado por el orador que anunció el término de la sesión del pleno para el informe, con lo que se dio la apurada salida del gobernador y de Guillermo Pacheco Pulido.