Ni marchas ni aumento de penas detendrán secuestros

Dice Genaro Ramírez

Olivia López Pescador

Las marchas y las penas severas no son la solución para combatir los secuestros, sino la prevención de la violencia con políticas públicas desde el salón de clases, el fortalecimiento del núcleo familiar y de los valores, un manejo transparente de los recursos y la depuración de la justicia y de los cuerpos policiacos, expresó Genaro Ramírez Rojas, consejero nacional del Partido Acción Nacional (PAN).

La emboscada que sufrieron los judiciales poblanos que iban a detener a una persona en la zona cercana al estado de Veracruz fue perpetrada por el crimen organizado, explicó, y el atentado contra el subprocurador Víctor Pérez Dorantes es una alerta de que ya está operando en Puebla alguno de los cárteles de la droga, del crimen organizado y del secuestro; “por consiguiente, cuando existe policía corrupta o funcionarios que tienen convenio con el crimen organizado, y cuando a éstos no les cumplen, se desquitan cobrando cuentas por medio de la violencia”.

“Yo creo que ese hecho que vimos de que balearon el automóvil del funcionario de la procuraduría es totalmente un sello del crimen organizado, porque fue con armas de uso exclusivo del Ejército, con balas de alto calibre, y definitivamente el tipo de agresión es el sello del crimen organizado, y hay que aceptar que en Puebla ya está el crimen organizado operando, incluso hay autoridades involucradas también dentro del crimen.”

El también coordinador de la asociación Panistas con la Sociedad destacó que el problema de la violencia causa 300 mil muertes cada año. En América Latina, dijo, el subgrupo de población más vulnerable es el de jóvenes, aunque éstos no sólo son las víctimas, sino también los victimarios, “casi el 30 por ciento de estas víctimas son mujeres y niños, cuyos victimarios son en muchos casos sus propios padres y esposos dentro del hogar”.

Recordó que la marcha del pasado sábado fue una protesta contra los gobernantes y los policías, pero la sociedad también debe hacer su parte, dijo, “desde su casa, desde la educación a sus hijos, al igual que las secretarías de Salud o Educación deben implementar medidas preventivas en las escuelas para evitar que los niños y jóvenes sean futuros ciudadanos violentos.

La violencia “causa más muertes prematuras que el cáncer, enfermedades cardiacas o el mismo sida”, subrayó.
Sostuvo que la violencia tiene un fundamento biológico, ya que “nace con el hombre y se desarrolla con base en las malas influencias extrínsecas que acompañan el desarrollo de cada persona; falta de afecto en la infancia, violencia y abuso sexual en la niñez. Hijos de madres golpeadas son futuros esposos golpeadores y futuros secuestradores y narcotraficantes.”

Estas influencias negativas, agregó, van germinando en el niño “creando posteriormente una cultura de la violencia, pero no se puede justificar la pobreza como causa de la conducta delictiva”.

Finalmente destacó que la enfermedad de la sociedad moderna es causada por la injusticia social, “lo único que se puede hacer es la prevención, pagando la deuda social que los gobernantes tienen con el pueblo, porque si no se toman medidas radicales, pronto esta cultura de la violencia se va enraizando en nuestro estado”.

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