Tuesday, 07 de May de 2024


No compita contra nosotros, señor gobernador, dijo en realidad el Presidente




Escrito por  Arturo Rueda
foto autor
De la inauguración del hospital de Cholula el 14 de noviembre, para acá, el mundo ha girado para regresar al punto original: Moreno Valle no es peñanietista, ni está en el ánimo del régimen. La necesidad presidencial de conseguir el apoyo del PAN para abrir el sector energético propició un acuerdo coyuntural. Pero los acuerdos tienen fecha de caducidad.

En la cima de lo que presumía como una nueva relación con el gobierno federal, Rafael Moreno Valle se sentía ya como un peñanietista más cuando el Presidente vino a Puebla para inaugurar el hospital general de Cholula: fan de hueso colorado, protegido por el gobierno federal y aliado incondicional. Cuidadoso hasta de los más pequeños detalles, afanoso en su papel seductor, incluso buscó mimetizarse en el color de la chamarra. En ese momento el mensaje presidencial sonó a abdicación frente al gobernador poblano: “no hay que competir”. Pero a la luz de los últimos acontecimientos, el mensaje fue mal codificado tanto por la prensa como por los propios miembros del régimen. La traducción más probable era: no compita contra nosotros señor gobernador. No era rendición, sino advertencia.

 

 

Pero la política cambia día a día, como dice Melquiades Morales Flores. De esa fecha, 14 de noviembre, para acá, el mundo ha girado para regresar al punto original: Moreno Valle no es peñanietista, ni está en el ánimo del régimen. La necesidad presidencial de conseguir el apoyo del PAN para abrir el sector energético propició un acuerdo coyuntural. Pero los acuerdos tienen fecha de caducidad.

 

 

La concatenación de hechos demuestra esa nueva relación política, que no es otra cosa que el regreso al origen del sexenio peñanietista: el frío. El último capítulo de esa “nueva relación” es la revocación del agandalle de plurinominales que el IEE había aprobado en la oscuridad de diciembre. Pero el Poder Judicial de la Federación no dejó pasar la jugarreta legal del morenovallismo para obtener otras dos curules de forma ilegal. Si el gobernador lo había acordado, no le respetaron el acuerdo. Si no lo habían acordado, le pusieron un freno.

 

 

Vea la siguiente concatenación de hechos de parte del PRI-gobierno en relación a Puebla y su gobernador.

 

 

1.- El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) ordena al gobierno estatal modificar el trazo del teleférico hacia una zona sin ningún valor turístico, dejando en evidencia la ilegalidad de la construcción. Aunque el redireccionamiento parece inocuo, las responsabilidades jurídicas y administrativas están latentes. Y más, si la tramitación del juicio de amparo continúa, y violando ese procedimiento, iniciaron el desmantelamiento de las torres.

 

 

2.- El dinero del Fonden por fin llegó, pero en el gobierno estatal sólo lo vieron pasar. La Secretaría de Hacienda depositó los 350 millones de pesos en las delegaciones federales de SCT y de Sedatu, por lo que los funcionarios locales no tocaron un peso.

 

 

3.- El morenovallismo esperaba a Pepe Chedraui con los brazos abiertos en la coordinación de la minibancada tricolor del Congreso local. En los últimos meses lo habían utilizado para llegar a personajes claves del círculo peñanietista, específicamente a Luis Miranda, el poderoso subsecretario de Gobernación. Cuando en el CEN tricolor se enteraron, decidieron empoderar a Víctor Giorgana para garantizar que aunque los diputados sean pocos, mantengan una sana distancia con el gobernador poblano.

 

 

4.- Concentrado en su tercer informe de gobierno y en recibir al presidente para inaugurar un hospital en Acatlán, a los operadores del gobierno les tomó por sorpresa la denuncia tricolor en el moribundo IFE contra Moreno Valle para revivir el tema de la publicidad de la revista Líder. Con un contenido tan absurdo, es obvio que se trataba de una vendetta por la denuncia del PAN contra Manuel Velasco, el gobernador chiapaneco. Imposible pensar que tal denuncia pasó por el escritorio de César Camacho, primero, y después por el de Miguel Ángel Osorio Chong.

 

 

5.- En una jugada osada que todos pensaban había sido negociada a cambio de la liberación de Alfredo Arango, el morenovallismo buscó agandallar plurinominales con una reasignación producto de la victoria de Víctor Giorgana. Era una maniobra burda, burdísima, ya que la asignación de 28 curules violaba la Constitución local, pese que los consejeros del IEE la justificaron con base a jurisprudencia. Ayer el TEPFJ, de plano, revocó la reasignación de curules y ordenó devolver a Silvia Tanús (PRI) y a Ignacio Alvízar (MC) sus constancias de mayoría, además de darle un tremendo coscorrón a los órganos electorales poblanos.

 

 

La política, como las matemáticas, también es una ciencia exacta. Así que si el lector sabe sumar, lo invito a hacerlo para conocer el nombre de la tendencia del momento: la bota sobre el cuello del gobernador.

 

 

 

 

 

 

Valora este artículo
(0 votos)
comments powered by Disqus