Friday, 26 de April de 2024

Protestan contra Peña, los detienen de forma arbitraria y luego los sueltan sin cargos

Martes, 20 Enero 2015 02:30
Los policías municipales de Puebla, bajo las órdenes de Alejandro Santizo, mancharon la visita del presidente Enrique Peña Nieto con la detención arbitraria y con uso excesivo de la fuerza de tres estudiantes que se manifestaban en apoyo a los normalistas de Ayotzinapa. 
  • Alberto Melchor Montero / @_BetoMM



La detención arbitraria y con uso excesivo de la fuerza de tres estudiantes que se manifestaban en apoyo a los normalistas de Ayotzinapa realizada por elementos de la Secretaría de Seguridad Pública y Tránsito Municipal (SSPTM) manchó la gira del Presidente de la Republica Enrique Peña Nieto, y provocó un choque entre dos de las universidades más importantes de Puebla.



Los elementos detuvieron a Shariff Guerrero y Édgar Juárez, estudiantes de Ciencias de la Computación y Ciencias Químicas de la BUAP, respectivamente, quienes se manifestaban de manera pacífica cerca de las 13 horas, luego de que una docena de universitarios logró burlar el cerco de seguridad y acercarse a 100 metros del Hospital del Niño Poblano, lugar donde entre jalones y empujones también estudiantes de la Universidad Iberoamericana que se disponían a tomar sus clases fueron reprendidos por los agentes, lo que provocó la injerencia de la institución jesuita en el conflicto.



Además de los dos jóvenes aprehendidos por elementos del Grupo de Operaciones Especiales (GOES), se registró una tercera detención a una calle de la Procuraduría General de Justicia (PGJ) cuando Gustavo Reyes participaba en el contingente que exigiría la liberación de sus compañeros frente a dichas oficinas, lugar en el que nuevamente fueron objeto de represión por parte de granaderos del Grupo Bengala que los encapsularon e intimidaron para sofocar las protestas.



Por la noche, los tres estudiantes fueron liberados tras pasar varias horas en los separos de la delegación Valsequillo del Ministerio Público y la de San Francisco, una vez que  no se presentaron cargos y tampoco se les pudo imputar la comisión de algún delito. Tras una polémica actuación, el rector Alfonso Esparza cantó victoria en la liberación de los jóvenes, logro que atribuyó a los servicios jurídicos de la institución.



La arbitrariedad en la detención exhibió la falta de protocolos por parte de las autoridades municipales que coordinaron los cercos de seguridad, pues lo que se disponía a ser una marcha ordenada y pacífica por parte de los estudiantes de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla, terminó convirtiéndose en una serie de errores al momento de detener a los escolares, quienes horas más tarde serían puestos en libertad.



 



Policía detuvo estudiantes sin respetar los protocolos



La policía municipal y los Grupos de Operaciones Espaciales a cargo de Alejandro Santizo, evidenciaron su falta de capacidad para responder en situaciones de presión, pues la responsabilidad de controlar a los universitarios poblanos que buscaban hacer llegar a los oídos del presidente Peña Nieto su inconformidad por los nulos avances en el caso Ayotzinapa, se les salió de la mano y tuvieron que detener a los jóvenes sin que éstos hubieran cometido algún delito.



Shariff Guerrero y Édgar Juárez, estudiantes de Ciencias de la Computación y Ciencias Químicas de la BUAP, respectivamente, fueron los dos jóvenes que se encontraban manifestándose de manera pacífica con otros tres compañeros frente a uno de los cercos de seguridad colocado a cien metros del Hospital del Niño Poblano, sin embargo, los cuerpos de seguridad comenzaron a avanzar, dejándolos acorralados.



Tras comenzar a golpear y jalonear a los estudiantes, entre ellos universitarios de la Ibero que se disponían a entrar a sus clases, los granaderos y elementos de la Policía municipal detuvieron a Shariff y Édgar sin que éstos fueran notificados sobre el delito que se les imputaba, además de que se les quitó sus acreditaciones que los avalan como estudiantes de la BUAP.



Ambos jóvenes lograron llegar hasta el punto referido después de que lograron burlar en primera instancia el cerco de seguridad que se colocó a las afueras de la preparatoria 2 de Octubre de la BUAP, y que dejó al contingente principal con estudiantes que se habían trasladado desde Ciudad Universitaria, sin posibilidad de seguir avanzando.



 



Detenciones contraponen a la BUAP y a la Ibero



Una vez que los estudiantes vieron cómo se llevaban detenidos a dos de los manifestantes, los escolares y autoridades de la Ibero abrieron las puertas de su institución para permitir que los otros tres jóvenes se resguardaran y no fueran detenidos o golpeados por los granaderos.



Ante dicha situación, la Universidad Iberoamericana no tardó en emitir una postura de apoyo total y de reconocimiento a “los derechos a la libre expresión, asociación y manifestación de las ideas”, recalcando que la situación que vive el país “exige de sus autoridades sensibilidad y un comportamiento respetuoso en el ejercicio de los derechos y libertades de la ciudadanía”.



Postura que resultó contraponerse con las recomendaciones que la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla realizó con respecto a la movilización de sus alumnos, en donde a través de un comunicado asentó que “desde el respeto a la libertad de manifestación y expresión, la BUAP reprueba cualquier acto fuera de la legalidad y se deslinda de acciones como la toma de camiones, de instalaciones o de cualquier acto vandálico”.



No obstante, la BUAP desdijo su posicionamiento inicial con un segundo comunicado en el que detalló que fue emitido previo a la detención de los universitarios, además de que “los servicios jurídicos de la BUAP están trabajando en la defensa de los estudiantes para conseguir su libertad inmediata sin cargos”.



 



SSPTM rompe el acuerdo de límites territoriales



Como si los errores en el proceder de los elementos policiales al detener a los estudiantes no hubieran sido suficientes, los comandados por Alejandro Santizo rompieron el acuerdo de los límites territoriales entre Puebla y San Andrés Cholula pues las detenciones de los manifestantes ocurrieron a las afueras de la Universidad Iberoamericana, zona comprendida como parte del municipio cholulteca.



La disputa por los límites que duró tanto tiempo y que tuvo que ser redefinida desde el Congreso del Estado, pasó de largo por parte de los uniformados que sin miramientos arremetieron contra los estudiantes sin importar que más tarde tuvieran que ser liberados pues no existieron pruebas ni acusaciones que los ligaran con actos vandálicos.













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Modificado por última vez en Martes, 20 Enero 2015 03:17