Comerciantes de la avenida 25 Oriente-Poniente se pronunciaron en contra de la instalación de una ciclovía en dicha arteria y advirtieron que ya se organizan para evitar que se concrete el proyecto que lleva a cabo el Instituto Municipal de Planeación (Implan) en la zona, pues aseguran que con ello se ahuyentarán a sus clientes al no existir estacionamientos en la zona, entorpecerán el tráfico y dificultarán la descarga de las mercancías que ofrecen en sus locales.
En un recorrido realizado por CAMBIO, los comerciantes externaron su molestia por el proyecto y hasta lo calificaron de absurdo, pues aseguran que en la vialidad no hay tránsito de bicicletas que la justifique, amén de que jamás fueron informados ni por el gobierno del estado ni por el Ayuntamiento que se instalaría en el lugar una ciclovía, sino que se dieron cuenta cuando comenzaron a colocar la señalética de no estacionarse y cuando se pintaron las líneas para definir los carriles de la avenida.
No obstante, algunos comerciantes avalaron el proyecto al señalar que “es hora de que los poblanos asuman una cultura diferente” a la que están acostumbrados como el hecho de querer estacionarse justo enfrente del local en donde buscan hacer compras o de no apoyar otros medios de transporte.
La ciclovía de la 25 Oriente-Poniente será la más grande de la Angelópolis, pues tendrá una longitud de 5.6 kilómetros. Inicia en la avenida Rosendo Márquez en la colonia La Paz y termina en la 24 Sur, a la altura del Parque ecológico.
El proyecto es impulsado desde el Instituto Municipal de Planeación y de acuerdo a lo que se ha dado a conocer está basada en los lineamientos dados por el Instituto de Políticas para el Transporte y Desarrollo (ITDP, por sus siglas en inglés) como un primer paso para que los habitantes de Puebla comiencen a ver en la bicicleta un medio de transporte alterno a los automóviles y con ello, además fomentar el ejercicio, se disminuya la cantidad de partículas contaminantes en la capital.
En contra
Sobre la avenida 25 Oriente-Poniente se han asentado durante los últimos años cientos de comercios principalmente de materiales para construcción, tuberías, de decoración, papelerías, electrónicos, bancos y expendios de comida, además de diversas escuelas públicas y privadas como el colegio Benavente.
Los comerciantes de materiales y de decoración son quienes más se quejan por esta medida, pues aseguran que nadie les informó y que se dieron cuenta porque hace dos semanas fueron colocadas las banderolas del lado derecho del carril con lo que se empezó a prohibir el estacionamiento y que a partir de hace una semana, trabajadores iniciaron con las labores para la adecuación del espacio para los ciclistas.
“No pasa mucha bicicleta ni mucha moto como para que nos tengan que quitar este espacio, además se van a ver más complicaciones, se van a estacionar en doble fila. Tenemos varias escuelas de este lado; es absurdo”, consideró la gerente de uno de los negocios de la zona, Mary Carmen Morales.
Reclamó que no ha habido información sobre el tema, además de que con el cierre de la vialidad por la rehabilitación que se dio durante tres meses, los establecimientos tuvieron pérdidas e incluso hubo quienes cerraron hasta por una semana por la polvadera que se generó.
“Ahora que el SAT nos está obligando a cambiarnos de régimen muy estricto, ojalá que el gobierno nos apoye no afectándonos, no podríamos pagar los impuestos que nos exigen porque es evidente que esta medida nos va a afectar. Nuestros clientes no van a tener lugar dónde estacionarse”, agregó la dueña de Galería de Pisos.
A dos cuadras de este negocio se ubica la tienda de abarrotes de don Hipólito, quien asegura que lleva más de 10 años en la misma zona. Él también está en contra, pues dice preocuparle cómo le harán sus proveedores para surtirle productos.
“Y más que andan como perros los elementos de Vialidad, van a querer infraccionar a cada rato a quienes nos descargan mercancía. No hay apoyo”, comentó.
A favor
Germán Lezama Pérez es asesor de ventas en otro local de azulejos de la 25 Poniente y encargado del mismo, quien en entrevista consideró que no afectará el proyecto a los negocios pues a su parecer quien tenga necesidad de comprar lo hará en el lugar que elija y para ello buscaría en dónde estacionarse.
Opinó que se debe apoyar, para que así también sirva de ejercicio a quienes están acostumbrados a trasladarse en vehículo de un lugar a otro. “Hace falta mejor cultura tanto para no estacionarnos en lugares prohibidos como en considerar utilizar otras vías de transporte”, añadió.