Pero la funcionaria sufrió un grave tropiezo. Hace unos días, el gobernador Barbosa Huerta declaró que la Comuna otorgó más de mil permisos de construcción que están fuera de la ley. Y no se trata de pequeñas edificaciones, sino costosos inmuebles.

 

En Cúpula, apuntamos que, en silencio, en discreta reserva y con toda paciencia, en Casa Aguayo se reúne toda la información del Ayuntamiento de Rivera. Se está acumulando un grueso expediente con datos que serán públicos y otros que son impublicables.

 

En el momento en que Barbosa emitió una expresión sobre lo que sucede en Desarrollo Urbano, se prendieron todas las alarmas en la oficina de Claudia y se llamó a los asesores jurídicos. En ese instante se dieron cuenta de la gravedad del tema.

 

Con prisa, pero en sigilo, la alcaldesa preparó su público anuncio.

 

Beatriz Martínez Carreño, secretaria de Desarrollo Urbano Sustentable, e Ismael Couto Benítez, Director de Medio Ambiente, fueron destituidos. Se asegura que se presentarán las querellas de rigor a la Fiscalía Anticorrupción.  

 

¿Qué representa? ¿Qué significa una conferencia de prensa para anunciar dos remociones?

 

Entraña lo siguiente: Claudia tomó una filosa daga, y en un acto de desesperación, se amputó un brazo gangrenado. Con eso trató de evitar que la infección la carcomiera entera.

 

El problema para la presidenta, es que la infección ya se ha extendido por otras partes vitales del organismo municipal; músculos y órganos internos ya están afectados. 

 

La corrupción en el Ayuntamiento de Rivera es como una gangrena que ya lesionó la vida pública de Puebla. Los ejemplos son los de siempre: descomposición en Seguridad Pública, millones de pesos volcados en bolardos, compra anómala de ventiladores inservibles, ambulantaje desbordado cuyos cobros se desconocen, entre otros temas.   

 

La falta de oficio político de la presidenta nuevamente quedó de manifiesto hace unas horas, cuando lanzó a uno de sus incondicionales, Pablo Salazar, como aspirante a la presidencia de Morena.  

 

Con esto pretende colocarse en el tablero nacional para que, en breve plazo, pueda decir: “Nos sumamos a tal aspirante”.

 

Como si a Mario Delgado o al legendario Porfirio Muñoz Ledo les importara el inexistente capital político de la señora.

 

Por favor.

 

Simplemente es un acto patético.

 

Como siempre, quedo a sus órdenes en  Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo.