Justo en el ecuador de su mandato como presidenta municipal, nadie espera nada de Claudia Pandemia Rivera Vivanco y todavía logra decepcionarnos.

 

Su ineptitud ha quedado más que acreditada, al grado de convertirse en el edil más impopular, seguramente, de la historia de Puebla capital. Una ineptitud que ya no necesita probarse.

 

Ahora que cada día es un día menos en el cargo, además de la ineptitud, conoceremos el lado más oscuro de su gestión: la rapacidad en el abuso de los recursos públicos.

 

Porque hasta ahora Claudia Pandemia ha navegado con la bandera de ingenua, pero otra cosa es ser conocida como corrupta.

 

Ella, que con dedo de fuego decidió erigirse como la Santona de la Cuarta Transformación, la de quien dice quién sí y quién no puede formar parte en Puebla.

 

Esa historia de rapacidad inevitablemente está ligada a ella, su familia, su pareja sentimental y un círculo reducido de colaboradores dedicados al expolio entre los que destaca Andrés García Viveros.

 

El primer caso documentado de corrupción en el Ayuntamiento de Puebla toca ese círculo cercano. Su hermana Mayte, responsable del DIF municipal y quien desde el inicio de la administración sueña con ser candidata a algo en 2021.

 

 

Nadie se da golpes de pecho, Pero ¿Usar la contingencia del coronavirus para robarse unos pesos desde el DIF municipal con la entrega de apoyos alimentarios y mini despensas?

 

Hay que ser muy miserables para robar con ese pretexto.

 

La historia la leyó ayer en CAMBIO.

 

“El Sistema DIF Municipal a cargo de la hermana de la alcaldesa, se encargó de la compra de los insumos de los 27 mil paquetes alimentarios que serán distribuidos con motivo de la contingencia del coronavirus, para lo que se otorgaron 12 millones 400 mil pesos.

 

De esta forma, el costo por microdespensa que reparte el Ayuntamiento de Puebla es en promedio de 489 pesos. Sin embargo, el pobre contenido de los paquetes alimentarios del Ayuntamiento revela que su costo es sustancialmente menor.

 

CAMBIO se dio a la tarea de cotizar el contenido del paquete alimentario del Ayuntamiento en diversos supermercados y abarrotes. De acuerdo con su contenido, puede cotizarse en 289 pesos, por lo que el Ayuntamiento lo adquirió 60 por ciento más caro.

Ese sobreprecio se calculó sobre compra minorista, ya que la adquisición de insumos para 27 mil paquetes alimentarios seguramente resultó más económica por el precio mayorista.

¿En tiempos de pandemia, quién se va a poner a revisar cuánto gasta un gobierno para comprar y repartir esas minidespensas? Eso pensaron los corruptos del Ayuntamiento de Claudia.

En vez de una desgracia, en la crisis del coronavirus encontraron una oportunidad para ganarse unos millones de pesos.

¿Cuánto se están robando?

Si las matemáticas no mienten, si cada paquete alimentario se compra con un sobreprecio por lo menos de 170 pesos, hablamos de que el moche es de 4.5 millones de pesos.

 

A ojos de todos, y con pretexto de la pandemia, se están robando 4.5 millones de pesos.

 

Este acto de corrupción recae sobre la hermana de la presidenta, Mayte Rivera Vivanco, que seguramente operó el negocio con Andrés García Viveros, el hombre del maletín de Claudia.

 

Este es el primer, pero no el único negocio que involucra a la familia cercana de la presidenta, que pretende justificar el moche con el argumento de “costos indirectos” para justificar el sobreprecio, e incluso abre la posibilidad de repartir más de las 27 mil despensas proyectadas originalmente. ¡Magia!

 

Comparadas con las macrodespensas del gobierno estatal, las de Claudia son una basura que no llega ni a limosna. Contienen tres sopas de pasta y tres sopas de espagueti, dos kilos de avena, una botella de aceite, una botella de cloro, un kilo de frijol y otro de arroz, un jabón en barra, una bolsa de jabón en polvo y una bolsa grande de galletas de animalitos.

 

¡Galleta de animalitos, yomiiiii, qué nutritivooooo!

 

¿459 pesos por galletas de animalitos y ni un gramo de proteína?

 

Ya sabíamos que Claudia era inepta. Ahora también sabemos que es corrupta.

 

Ojalá la ASF se encargue de poner un freno a este robo a ojos de todo Puebla.