La planta tratadora de aguas residuales del municipio de Huauchinango, nuevamente fue clausurada por haberse construido sin permisos de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente PROFEPA y la SEMARNAT, además de que esta obra fue construida en una zona donde se afectan mantos freáticos.

De acuerdo a información de El Sol de Puebla, la regidora de Salud, Gema Salas Cordero, dio a conocer que esta planta tratadora de aguas residuales se realizó durante el gobierno del ex gobernador Rafael Moreno Valle Rosas, por lo que una vez más fue clausurada por la PROFEPA.

Fueron más de 160 millones de pesos, los que se utilizaron para la construcción de esta tratadora de aguas residuales, la cual fue inaugurada en la administración municipal de Gabriel Alvarado Lorenzo, en mayo del año 2017, en compañía de José Antonio Gali Fayad.

En el mes de julio del mismo año, se confirmó que, al menos tres conductas y omisiones constitutivas de delitos contra el medio ambiente y el ordenamiento ecológico fueron cometidas durante la construcción de la planta de tratamiento de aguas residuales de Huauchinango en la que se invirtieron recursos por 162 millones de pesos provenientes de los gobiernos estatal y federal.

La obra millonaria desde el pasado 18 del mes de agosto de 2020, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) volvió a clausurar la infraestructura por permanecer sin permisos de la Semarnat.

Es preciso mencionar que esta obra, nunca ha funcionado para evitar descargas de aguas negras de la cabecera municipal de Huauchinango al río Necaxa, incluso en abril del año 2017, poco antes de que se inaugurara, se pudo saber que carecía de permisos ambientales, de acuerdo con información publicada en la página oficial de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).

Además un experto en el tema, el biólogo Francisco Ledezma, subrayó que tanto la empresa constructora como el gobierno del estado que licitó y ejecutó los trabajos sin contar con diversas licencias ambientales, incluidos los cambios de uso de suelo forestal, incurrieron en varios de los ilícitos previstos y sancionados en el Código Penal Federal en materia de recursos naturales y otras conductas ilegales que atentan contra el ordenamiento ecológico y de impacto ambiental, considerando que se está en un Área Natural Protegida.

Ahora la planta tratadora de aguas residuales, fue clausurada por segunda ocasión, por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), con el argumento de haberse construido sin permisos ambientales y por estar edificada en una zona donde se afectan mantos acuíferos.