En cuatro meses, el Ayuntamiento de Puebla encabezado por Claudia Rivera Vivanco ha gastado más de 20 millones de pesos, en la compra de insumos para afrontar la pandemia COVID-19, gafas protectoras y cubrebocas, así como en microdespensas, programa en el cual desembolsó 12.4 millones de pesos.

A través de la página de Gobierno Abierto del Ayuntamiento de Puebla, dentro del apartado de Políticas de Transparencia Focalizada COVID-19-Contratos Abierto detalla que el gobierno municipal tan sólo ha realizado seis acciones para afrontar la pandemia por el coronavirus.

En el cual se puede observar que del lapso del mes de marzo a abril del presente año gastó un total de 16 millones 773 mil 448 pesos, de la compra de productos antisépticos, sanitizantes, gel antibacterial y suministros médicos, así como las 27 mil microdespensas que otorgó el Ayuntamiento de Puebla.

Dentro de los contratos detalla que por 192 cremas antisépticas, 192 jabones antisépticos y 144 sanitizantes, el gobierno pagó un total de dos millones 75 mil 185 pesos, por gel antibacterial, invirtió un total de un millón 102 mil pesos y se ejerció un millón 176 mil 262.04 por la compra de 52 mil cubrebocas y 263 termómetros para medir la temperatura.

Asimismo, informa que por la compra de 27 mil despensas, la administración municipal pagó un total de 12 millones 420 mil pesos, de las cuales un 90 por ciento ya se han entregado a las personas vulnerables de la capital.

Para los meses de mayo y junio, el gobierno municipal tan sólo desembolsó tres millones 631mil tres pesos, con los cuales adquirió 658 overoles, 650 mil cubrebocas, dos mil 401 gafas protectoras y 960 mascarillas de tela, mismos que fueron entregados a los trabajadores de la Secretaria de Seguridad Ciudadana, Protección Civil e Infraestructura y Servicios Públicos.

Además, el portal muestra que los 15 millones 900 mil pesos que se iban a destinar para la compra de 12 ventiladores ‘baratija’ se encuentra en las arcas municipales, toda vez que el contrato quedó cancelado debido a que el Gobierno del Estado no aceptó los respiradores de segunda mano.