Repartidores de  Rappi, Uber Eats y la recién llegada DiDi Food  de Puebla, se rebelaron contra dichas empresas para exigir un aumento salarial y mayor seguridad además de que denunciaron que estas plataformas se quedan hasta con el 50 por ciento de las tarifas de entrega.

Esta mañana en conferencia de prensa en el Asta Bandera del Zócalo de la capital, la representante de los trabajadores de dichas aplicaciones dedicadas a repartir alimento, Valeria Rojas acusó que no cuentan ni con un seguro de vida para laborar, además de que pidieron mejores tarifas que beneficien a los repartidores que no obtienen ganancias por lo que en su mayoría se lo quedan estas empresas.

En este sentido, explicó que los repartidores en estos momentos de crisis por la contingencia necesitan de dinero para mantener a su familia, sin embargo mencionó que las empresas abusan de la necesidad de sus empleados, pues no cuentan con una garantía de seguridad ni atención hospitalaria en caso de que les ocurra algún incidente.

También refirió que hace falta un incremento salarial  y tarifas que beneficien a los repartidores, pues en su mayoría son jóvenes estudiantes que por la pandemia están laborando para solventar sus gastos o a sus familias.

Por último, Valeria Rojas hizo un llamado a las autoridades y pidió diálogo con el Secretario de Trabajo Abelardo Cuellar con el fin de hacer una exhaustiva revisión a estas plataformas digitales con el fin de que se pueda garantizar la vida y seguridad de los empleados.