El asesinato de José Luis Tehuatlie Tamayo, un niño de apenas 13 años de edad, cumple este día su octavo aniversario, tiempo en el que sus familiares buscaron justicia para el menor que fue la primera víctima de la Ley Bala que existió durante el morenovallismo y que a la fecha siguen pidiendo que los hechos no queden impunes.
La tarde del 19 de julio de 2014 el pequeño José Luis perdió la vida a consecuencia de un paro respiratorio después de una larga agonía de 10 días tras haber recibido el impacto de una bala de goma por parte de elementos de la Secretaría de Seguridad Pública que pretendían contener una manifestación de pobladores de la comunidad Chalchihuapan.
Un día antes el infante había sido diagnosticado con muerte cerebral, por lo que las intenciones de su madre, Elia Tamayo, eran las de mantenerlo con vida a través de los aparatos a los cuales se encontraba conectado, aunque esto no pudo lograrse.
La muerte del menor conmocionó a todos los poblanos, ya que a través de un breve video se dieron a conocer imágenes en donde aparece con la cabeza empapada de sangre tras la fractura de cráneo que sufrió.
Fue la noche del 22 de julio cuando familiares, amigos y la población entera de su comunidad le dieron el último adiós a Tehuatlie Tamayo, tras haber sido enterrado en un panteón para darle descanso.
El gobierno morenovallista intentó cambiar la versión de los hechos, presionando a Elia Tamayo y a la abuela del niño para que responsabilizaran a los manifestantes y exoneraran a los uniformados, hecho que no sucedió.
Sin embargo, las voces que exigían justicia fueron en aumento, lo que originó que se hiciera una megamarcha para exigir a las autoridades que se pudiera aplicar justicia contra los responsables.
De igual manera, los hechos alcanzaron instancias nacionales con las denuncias presentadas ante la CNDH y además de los pronunciamientos hechos por organismos internacionales que condenaron los acontecimientos.
Ley Bala, la causante de la muerte
El 12 de mayo del 2014, el entonces gobernador Rafael Moreno Valle envió al Congreso local una iniciativa para regular el uso de la fuerza pública, permitiendo el uso discrecional de las armas no letales por parte de policías en contra de manifestantes, siendo bautizada como la “Ley Bala”.
Fue precisamente este marco normativo el que permitió que los elementos de la SSP pudieran utilizar las balas de goma en contra de los pobladores de Chalchihuapan con el objetivo de disipar la manifestación que se encontraban realizando y que provocó la muerte del pequeño José Luis Tehuatlie.
Ante la polémica que generó el tema, Rafael Moreno Valle envió una iniciativa al Congreso del Estado para abrogar la Ley Bala y la elaboración de una nueva, acusando que hubo una estigmatización sobre dicha ley.
Fue hasta septiembre del 2018 cuando los integrantes de la Sexagésima Legislatura abrogaron la disposición morenovallista; sin embargo, en su calidad de gobernador, Antonio Gali Fayad vetó el decreto del Poder Legislativo, argumentando que contaba con distintas inconsistencias.
La eliminación total de la Ley Bala sucedió hasta octubre del 2019, cuando los diputados de Morena y sus aliados lograron imponerse tras dos intentos previos y con ello “matar al engendro morenovallista”.
Indemnizaron a la familia con 500 mil pesos
El ex secretario de Seguridad Pública, Facundo Rosas, fue señalado como uno de los principales responsables de la muerte de José Luis Tehuatlie, quien exhibió su cinismo y miseria humana en sus redes sociales cuando dio a conocer que había pagado una indemnización de 500 mil pesos a la madre del niño.
Fue a principios de este año cuando el karma alcanzó al ex funcionario estatal, siendo detenido por los delitos de tráfico de armas.
Dentro de los hechos también se determinó la detención de seis policías estatales que estuvieron relacionados con la muerte del menor de edad, enfrentando procesos judiciales por ello.
Al principio de su gestión el gobernador Miguel Barbosa Huerta indicó que existían posibilidades de que el caso Chalchihuapan pudiera ser abierto de nuevo, a fin de que se aplicaran sanciones en contra de todos los involucrados y que no existiera impunidad en el asesinato de José Luis Tehuatlie.
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David Meléndez
@dav_ms6