Una vez más el triunfador reportero de la Casa Blanca, el poblano Armando Guzmán, volvió a su inolvidable Puebla.
Aprovechó sus cortas vacaciones de verano y vino a disfrutar de la ciudad que lo vio nacer, de las chalupas, del mole poblano, los tacos árabes, e inevitablemente en estos días, de los chiles en nogada.
Cada calle recorrida sacudió los recuerdos de su infancia feliz, de su adolescencia dorada, de su universidad en el campus de Santa Catarina, y su primer empleo como funcionario de la entonces denominada Comisión de Turismo del gobierno del Estado, de la que era titular y su jefe otro personaje: Lalo Ganime David, quien gracias a un equipo de entusiastas y comprometidos chicos como Armando Guzmán y Miguel Ángel Castellanos, alternaba su papel de director de Turismo con el de gerente de la tienda Salinas y Rocha.
¡Qué tiempos!
Cuántos recuerdos.
Una apresurada visita que no alcanzó para mucho, sólo para saborear la nostalgia, para recordar tantas hazañas.
Como cuando recibía caravanas de norteamericanos que venían a acampar en terrenos en inmediaciones de la UDLAP, antes de tanta urbanización, tantos fraccionamientos, tantas casas.
Los días en los que organizaba el certamen de Señorita Puebla. Y cuando llegaba toda una caravana de vehículos con el logotipo de Televisa para grabar con Raúl Velasco partes del programa ‘Siempre en Domingo’.
Pero en medio de la vorágine de una intensa agenda de trabajo a Armando Guzmán le llegó el día y se enamoró de una Mexico-norteamericana, Martha, con la que se casó.
Juntos decidieron ir en busca de mejor suerte a EU, en donde tuvo la oportunidad de incorporarse a trabajar en los medios en los que ha hecho una carrera exitosa en Univisión y como corresponsal de TV Azteca y Radio y Telefórmula.
Con maletas cargadas de recuerdos y antojos después de haber recibido la declaratoria de ‘Hijo Distinguido del Municipio’ y de haber dialogado con estudiantes de Relaciones Internacionales de la Universidad Anáhuac, a invitación del embajador Ramón Xilotl ,director de la escuela, Armando regresó a Washington con la suerte del buen reportero, que al retomar su agenda le tocó seguirle la pista al ex presidente Trump que custodiado por 40 vehículos decidió el show de entregarse a la justicia para convertirse en el primer expresidente fichado en los Estados Unidos.
¡Hasta la próxima Armando!
El hijo del famoso doctor Rodolfo Guzmán volverá y seguirá disfrutando de su Puebla, a la que ha honrado con su prestigio profesional.
