Qué pena la polarización que estamos viviendo el pueblo de México, en la coyuntura de un momento político que resulta histórico cuando se trata de definir el futuro de esta noble nación.

 

La diversidad de opiniones se vale para enriquecer un proyecto, una estrategia política a la luz de la transparencia.

 

Lo lamentable es que esa polarización hoy comienza desde las familias a las que les cuesta trabajo dirimir sus diferencias por encima del sano ejercicio de la confrontación con argumentos.

 

Y esto apenas se comienza a calentar, a un año de tomar decisiones.

 

Cabe la pregunta

 

¿Cómo llegaremos para entonces?

 

Los tiempos de la borregada debemos de tener claro que ya pasaron -según se afirma- y quedaron grabados en los anales de la historia de la vida política de México.

 

Hoy tenemos que aprender a vivir y convivir por encima de nuestras diferencias, sin arrebatos, por el contrario, con la civilidad que la evolución nos debe dar.Esas diferencias además son necesarias y enriquecen un proyecto.

 

El reto es aprender a enriquecer y evolucionar nuestros conceptos y convicciones para convivir en una sociedad plural e incluyente.

 

¡Claro!

 

Quienes hoy nos gobiernan están obligados a darnos el ejemplo, por encima de las diferencias y convicciones personales.

 

El reto insisto, es evolucionar y debatir civilizadamente, sin denuestos, y con respeto.

 

Y el respeto es de todos para todos.

 

El domingo el presidente mostró su respeto a la movilización en favor del INI, hay que reconocerlo, pese a uno que otro inspirado que buscó la confrontación con los participantes, lo cual no evolucionó.

 

Ya el día después desde su micrófono mañanero, el mandatario arremetió como era de esperarse, en contra de los organizadores y de los que participaron.

 

“Genio y figura”.

 

Un ejercicio cotidiano que hoy solo nos remite a informarnos “a quien le tocó”.

 

Ya personajes como Loret de Mola, Ferriz de Con, López Dóriga, Krauze, Aguilar Camín, X Gonzáles; ya deberían de pagar por tanta publicidad cada mañana y en red nacional en radio, televisión, prensa escrita y redes.

 

Mayor cobertura, imposible.

 

Hay que tomarlo como la promoción gratuita.

 

Lo preocupante es que atice la confrontación.

 

Esa sí, ¡No se vale!