Friday, 17 de May de 2024


Este es el nuevo PAN: purga de los liderazgos históricos y el giro al pragmatismo




Escrito por  Arturo Rueda
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La parte visible de la factura que cobra el gobernador poblano en la Comisión Permanente es la incorporación de su esposa Martha Erika Alonso, y del magistrado Roberto Grajales. Pero la parte invisible es todavía más interesante: la mayoría de los 27 perfiles propuestos por Madero, y que hacen mayoría, son simpatizantes abiertos del proyecto presidencial del morenovallismo. Maderistas de origen, liderazgos regionales, son el embrión del proyecto que busca regresar a Los Pinos

La conformación de la nueva Comisión Permanente de Acción Nacional evidencia una purga de los liderazgos históricos que en los últimos 15 años se adueñaron de las decisiones del partido y refleja una recomposición no sólo de cuadros, sino de la forma de entender la lucha por el poder. La victoria de Gustavo Madero, en casi todos los sentidos, fue la muerte del PAN histórico de los ideales, de la brega eterna, de la ética en el ejercicio del presupuesto y de la lucha contra el autoritarismo del PRI. A la nueva generación nade de eso le interesa: entiende que un partido político es una maquinaria de guerra para conseguir posiciones de poder y dinero. A través de casinos, moches u obra pública, pero lo importante es ganar elecciones para así poder ganar millones. Es la gente decente del nuevo PAN.

 

 

En el nuevo PAN no hubo lugar para los que querían el regreso al albiazul histórico. Los nombres que dominaron más de una década, representantes del pensamiento conservador, los fundadores que venían de las cámaras empresariales, los resabios de los Bárbaros del Norte y sobre todo los Yunques, han sido borrados. Adiós a los Ocejo, los Espina, los Álvarez Bernal, los Romero Hicks, los Bueno Torio, los Cambranis, los Luege y los García Portillo. Sobre todo, adiós a todo lo que huele a Fox y a Calderón. La única sobreviviente de la purga fue Josefina Vázquez Mota.

 

 

El nuevo PAN se parece más a Moreno Valle que a Luis H. Álvarez.Quizá por ello la mayoría de los 40 miembros de la Comisión Permanente, quienes definirán los candidatos a diputados federales de 2015, y por supuesto se apropiarán de las plurinominales, tienen como rasgo común el pragmatismo político: a todo se acomodan y con todos acuerdan. El elemento común para negociar es el dinero: carecen de fuertes ideales, pero tienen abultadas chequeras. Y las quieren seguir llenando. El único mandamiento que conocen estos neopanistas es ganar elecciones: por eso son el camino ganador.

 

 

La parte visible de la factura que cobra el gobernador poblano en la Comisión Permanente es la incorporación de su esposaMartha Erika Alonso, y del magistrado Roberto Grajales. Pero la parte invisible es todavía más interesante: la mayoría de los 27 perfiles propuestos por Madero, y que hacen mayoría, son simpatizantes abiertos del proyecto presidencial del morenovallismo. Maderistas de origen, liderazgos regionales, son el embrión del proyecto que busca regresar a Los Pinos un sexenio después de ser expulsados.

 

 

Estos neopanistas, ya embajadores abiertos del morenovallismo en sus estados, son:

 

 

Miguel Ángel Yunes (Veracruz)

Aurora Aguilar (Tlaxcala)

Margarita Arellanes (Nuevo León)

Federico Döring (Distrito Federal)

Raúl García (Tamaulipas)

Rodolfo Dorador (Durango)

Ulises Ramírez (Estado de México)

Jorge Romero (Distrito Federal)

José Isabel Chabelo Trejo (Zacatecas)

Carlos Palomeque Archila (Chiapas)

 

 

Es cierto: no tienen el gran prestigio, ni estudios, ni son hombres de ideas. Pero como se dicen en el argot político saben operar. Es decir, conocen el arte de la trasmutación del dinero en votos, y de los votos en dinero. Chabelo Trejo mueve los dineros en San Lázaro. Margarita Arellanes, alcaldesa de Monterrey, tiene vínculos oscuros con el zar de los casinos. Federico Döring tuvo papel en la trama de los videoescándalos de Ahumada hace una década. De los Yunes qué cosa buena se puede decir, excepto que tienen mucho dinero.

 

 

Habrá quienes opinen que este nuevo PAN no se sirve a México. Yo creo que la discusión es absurda: este es el PAN que tenemos, y el que nos vamos a tener que comer en los próximos años. Quizá otra cosa sería si hubiera ganado Cordero, pero lo cierto es que su derrota fue aplastante, y prácticamente su grupo ha sido expulsado del albiazul. No hay espacio para ellos. La operación cicatriz fue un mito genial.

 

 

Incluso el Yunque ha sido reducido a su mínima expresión: aunque Marco Adame fue incluido en la planilla, sus espacios en la Comisión Permanente solamente son Héctor Larios y Laura Rojas. El ex alcalde Eduardo Rivera quiso, pero nadie lo propuso. Que nadie se llame sorprendido por lo que viene.

 

 

 

 

 

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