Alberto Hernández Avendaño, trabajador de la construcción, dejó en orfandad a un pequeño de dos años de edad y a un nonato luego de perder la vida al quedar atrapado en un alud de tierra a más de cinco metros de profundidad en la zona de la Central de Abastos.

Ante este hecho el abogado de la constructora Jiménez Cuéllar y Asociados, Arturo Gutiérrez afirmó que el trabajador contaba con las medidas de seguridad y que la empresa apoyará a los deudos, ya que Hernández tenía seguro de vida.

Asimismo informó que el trabajador estaba “colocando protecciones para evitar el derrumbe, eso fue lo que sucedió. Él tenía toda la protección, tenía casco”.

 El hecho ocurrió la tarde de este lunes en la Avenida del Conde a donde arribaron elementos de Protección Civil y paramédicos de Cruz Roja quienes hasta altas horas de la noche se dedicaron a rescatar el cuerpo.

Alrededor de las 17:00 horas se recibió el llamado de auxilio a través del 911. Sus compañeros trataron de rescatarlo, pero sus esfuerzos fueron en vano y ante el riesgo de otro desprendimiento llamaron a los elementos de Protección Civil.

El lugar fue acordonado por los policías municipales para que los curiosos no se acercaran y entorpecieran las actividades del rescate del cadáver de quien en vida se llamó José Alberto Avendaño Hernández, de 23 años de edad.

Deja a dos en orfandad

Avendaño Hernández trabajaba en la construcción desde hace dos años, según comentaron conocidos del occiso pues con el nacimiento de su primogénito tuvo necesidad de buscar un empleo.

La madre del pequeño se encuentra embarazada, por lo que sus hijos crecerán sin su padre.