En abril de 1987, un grupo de cinco alpinistas rusos escalaron el monte Elbús, desafortunadamente nunca volvieron de la expedición. Equipos de rescate hicieron todo lo posible por encontrarlos, pero no obtuvieron resultados.

Fue hasta hace algunos días que unos turistas que visitaban el lugar encontraron un cuerpo congelado y cuando los expertos indagaron confirmaron que se trataba de Yelena Bazýkina, una de las alpinistas desaparecidas hace más de tres décadas. 

El cuerpo de la deportista fue encontrado con múltiples fracturas a más de 4 mil metros de altura, en la cumbre de la montaña. Luego de reunir los datos, los especialistas determinaron que ella y su equipo quedaron sepultados por una avalancha. 

El cuerpo pudo ser identificado gracias a que entre sus cosas se hallaron sus documentos, dinero y los boletos de avión de ida y vuelta entre Moscú y Minerálnye Vody. 

Las autoridades locales informaron que las altas temperaturas registradas el verano pasado derritieron varias capas de hielo dejando el cuerpo de Yelena al descubierto por lo que los rescatistas han comenzado un misión en busca de los otros exploradores.