El virtual presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador, corrigió su discurso ‘apapachador’ hacia Luis Miguel Barbosa Huerta, pues sentenció que los magistrados del tribunal federal son los únicos que decidirán quién será el próximo gobernador de Puebla.

Posterior a reunirse en privado con 30 de 32 miembros de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), el presidente electo respondió, entre otros temas, sobre cómo fue el encuentro con Antonio Gali Fayad, gobernador de Puebla, dado el conflicto poselectoral y la relación que tendría con Martha Erika Alonso Hidalgo, gobernadora electa.   

“Se trató el tema y la postura es que van a decidir los magistrados del tribunal electoral, todavía no hay una resolución sobre este tema, no termina el proceso electoral, es una elección, vamos a decir impugnada, y la autoridad competente va a resolver y hay que esperar a que esto suceda”, dijo en conferencia de prensa.

Por eso, prefirió no adelantarse ni hablar de la forma como trabajará con el próximo mandatario estatal pues insistió que hay duda sobre lo que resolverán los magistrados de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), donde Morena pretende anular la elección de gobernador de Puebla.

Con lo anterior, López Obrador cambió su discurso ‘apapachador’ hacia Miguel Barbosa, ex candidato al Gobierno del Estado por la coalición Juntos Haremos Historia, a quien dio espaldarazo el miércoles en reunión con cinco gobernadores, diputados locales y alcaldes electos del país.

Gobierno federal no castigará ni tomará represalias contra gobernadores

Mencionó que en el encuentro, los mandatarios pidieron revisar el convenio de coordinación fiscal, por lo que expuso que ha decidido iniciar su gobierno con pocas reformas, respetando la autonomía del poder legislativo, además les pidió participar en la estrategia de seguridad y les dejó en claro que no utilizará al gobierno federal para castigar o tomar represalias en contra de gobernadores.

Ante la inquietud sobre los 32 coordinadores estatales nombrados para encargarse de vigilar los programas de desarrollo y, que a su vez, sustituirán a los delegados de las dependencias federales, el presidente electo explicó que son parte del plan de austeridad.

“Es parte del plan de austeridad que se va a aplicar en todo el gobierno, hasta me quedé corto porque les dije que tenía información de que había estados con 15 y 16 delegaciones de las distintas secretarías del gobierno federal y me dijeron que habían hasta 50, esto no es posible, tenemos que ahorrar”, abundó.

Con excepción de los mandatarios de Nuevo León, Jaime Rodríguez Calderón ‘El Bronco’ y Aristóteles Sandoval Díaz, de Jalisco, que se ausentaron en la reunión de este jueves en el Colegio de Ingenieros Civiles de México en la Ciudad de México, el resto de mandatarios expuso su disponibilidad para trabajar de la mano con el nuevo gobierno federal que entrará en funciones a partir del primero de diciembre.