La Auditoría Superior de la Federación (ASF) detectó diversas irregularidades en el Segundo Piso de la Autopista México-Puebla, la última megaobra morenovallista, como el hecho de que comenzó operaciones antes de obtener los permisos, pésima calidad en la construcción lo cual provocó inundaciones, así como 876 pagos  indebidos con recursos del FONE, subejercicio de recursos en diversos rubros, entre otras anomalías.

De acuerdo con el tercer Informe de Resultados de la Fiscalización Superior de la Cuenta Pública 2016 que presentó la ASF a la Cámara de Diputados, en el periodo 2012-2016 en la administración de Moreno Valle, no se ha logrado solventar mil 716.7 millones de pesos.

En la cuenta pública 2016 se observó un monto de 500 millones de pesos, que representan el .7 por ciento del monto total auditado.

Los 500 millones de pesos observados corresponden a los recursos del Gasto Federalizado Programable, donde 348 millones 500 mil pesos corresponden a un subejercicio, de éstos 101 millones aún no han sido aclarados y 50 millones 600 mil pesos pertenecen a los montos de recuperaciones determinados.

Puebla ocupó el primer lugar a nivel nacional en el Índice de Desempeño de la Gestión del Gasto Federalizado Programable de la cuenta pública con un total de 90.3 por ciento auditado, a diferencia de 2015 cuando se alcanzó un porcentaje de 74.4. Además, durante el año que la ASF informó, Puebla contó con el mejor balance entre la muestra auditada y el monto observado.

ASF evidencia corrupción en el Segundo Piso de la México-Puebla

La ASF verificó los recursos otorgados para la Construcción del Segundo Piso de la Autopista México-Puebla, equivalentes a tres mil 584 millones 834.1 mil pesos, de los cuales el 100 por ciento de ellos fueron utilizados.

A través del dictamen número 1295-DS-GF se evidenció la ‘mala calidad’ y demás anomalías administrativas del viaducto elevado, cuya concesión quedó en manos de las empresas  OHL-Pinfra, constructoras favoritas de la administración morenovallista.

Ante las irregularidades detectadas por la ASF durante los recorridos y documentos revisados se emitieron 27 observaciones, de las cuales sólo nueve fueron solventadas, generando de las 19 pendientes dos recomendaciones, nueve solicitudes de aclaración y ocho promociones de responsabilidades administrativas sancionatorias contra funcionarios.

Entre estas irregularidades se encuentra la puesta en operación y explotación del Libramiento Elevado sin que los trabajos estuvieran concluidos, la falta de implementación del Sistema Inteligente de Transporte y los ‘incentivos’ de un mes de ingresos recibidos, a pesar de que la obra fue entregada con dos meses de atraso.

Asimismo, en las auditorías se encontró que los trabajos realizados por las concesionarias a destiempo y con un sobrecosto de más de 500 millones de pesos fueron realizados con material de baja calidad, pues se detectó “Filtración de aguas pluviales al interior de las trabes prefabricadas; presencia de manchas y humedades en cabezales, trabes, losas y prelosas; la desconexión de ramales de tuberías de PVC, carencia de marcos y tapas en los registros, filtración de agua y humedad en los registros hidráulicos”.

Otra de las observaciones de la ASF fue el costo unitario de 55 pesos que designó la concesionaria al recorrer una parte o por completo la vialidad, lo cual carece de sustento documental.

SEP realizó 876 pagos indebidos

De acuerdo con el dictamen 1309-DS-GF, realizado sobre los Recursos del Fondo de Aportaciones para la Nómina Educativa y Gasto Operativo (FONE), durante el 206 se destinaron un total de 15 mil 908 millones 895 mil pesos, de los cuales el 98.6 por ciento fue auditado por la ASF.

De este Informe se detectó que la Secretaría de Educación Pública (SEP) realizó 876 pagos con un valor total  de cuatro millones 606.2 mil pesos a personal adscrito a la Subsecretaría de Educación Superior, Bachillerato Digital y Bachillerato Tecnológico, que no corresponden al objetivo del FONE.

El análisis de la ASF detectó que existió una gestión razonable de los recursos federales, sin embargo las metas establecidas por los indicadores del fondo registraron insuficiencias en la calidad educativa, ya que no se logró la cobertura total en los niveles de educación básica de preescolar.

Informes del FASP, sin calidad y congruencia

La revisión de los recursos correspondientes al Fondo de Aportaciones para la Seguridad Pública de los Estados y del Distritos Federal (FASP) aportados por la Federación durante 2016 fueron por un total de 273 millones 427.8 mil pesos. Sin embargo, el Gobierno del Estado sólo ejerció el 89.3 por ciento, es decir, 244 millones 171 mil pesos.

Esta situación no le permitió cumplir cabalmente a la administración morenovallista con las 139 metas establecidas por el fondo, ya que sólo se alcanzaron 85, igual al 61.2 por ciento, mientras que las 54 restantes quedaron pendientes.

Otra de las deficiencias localizadas por la ASF fue la falta de transparencia en la gestión del FASP, debido a que los formatos de Gestión de proyectos, Avance financiero y Ficha de indicadores, a pesar de ser presentados en tiempo y forma, carecían de calidad y congruencia, puesto que no fueron coincidentes con los reportes entregados al Consejo Estatal de Coordinación del Sistema Nacional de Seguridad Pública (CECSNSP).